Opinión

¿Y si vamos a la guerra?

Como costarricenses tenemos un dicho que hemos adulterado, como alcohol de contrabando, es una frase que reza “Dichosa la madre costarricense que sabe que su hijo al nacer jamás será soldado”, dicha frase salió de la boca del filántropo Ryoichi Sasawa, y esta frase se usa en conmemoración de nuestro más reciente feriado el 1 de diciembre, cuando celebremos la abolición del ejército, el cual le damos gracias a el entonces presidente Jose Maria Figerres Olsen, pero nace la duda ¿será que jamás seremos soldados? Nuestra constitución en su artículo 12 menciona que “solo por convenio continental o para la defensa nacional podrán organizarse fuerzas militares; unas y otras estarán siempre subordinadas al poder civil; no podrán deliberar, ni hacer manifestaciones o declaraciones en forma individual o colectiva”, con este artículo, redactado bajo el mandato el cual removió al ejército, si se leyera en nuestra actualidad, no nos brinda un futuro esperanzador.

Analizaremos el artículo de la siguiente manera, lo dividiremos dentro de las 2 causales por las cuales debemos organizar fuerzas militares, por convenio continental o para la defensa nacional, iniciemos con la defensa nacional ¿Qué tan probable es que Costa Rica se vea vulnerable ante otras nacionales? Pues en el año de de 2010 tuvimos una pseudoinvasión, cuando se denunció una invasión a nuestro soberanía, en el territorio de isla calero, esto solo llevó a una confrontación meramente diplomática, nada que podemos denominar como defensa nacional, no es como que en el pasado tengamos anécdotas de declarar la guerra a otros países. Recordando a nuestro presidente Rafael Ángel Calderon que en 1941 le declaró la guerra a Alemania un 11 de diciembre. Nuestra historia como país tiene breves momentos en los cuales nos hemos visto en la necesidad de defender nuestra nación.

Continuando con la última causal, qué tan probable es que Costa Rica deba responder y formar un ejército por convenio continental, que dentro de la lectura, se entiende que solamente sea por convenio de nuestro continente americano, pero por espíritu podemos acreditar que no deja por fuera a otros convenios internacionales. En este artículo, solo exploramos la OEA (Organización de los Estados Americanos) en el cual en su artículo 2 apartado a mencionar de “Afianzar la paz y la seguridad del Continente” este por lo cual observamos como estamos a afianzar la paz y la seguridad del continente, aunque en sus principios condenamos a la guerra como agresión, pero aún así en su artículo 29 menciona sobre la legítima defensa colectiva que se podría hacer bajo los tratados especiales que existan, si es que existen.

¿Y si vamos a la guerra? Costa Rica tiene su neutralidad, a grandes rasgos menciona que no vamos a intervenir o a apoyar en conflictos bélicos, pero tenemos tratados que nos obligan a hacer lo contrario y para la suerte o mala dicha de todos, no hicimos reserva alguna, así que las aceptamos, de cierta forma ciegamente.

En modo de conclusión, dentro de nuestro panorama político, un enfrentamiento armado contra nuestro país se ve lejos, pero en todo caso, que entremos a la guerra, como podemos ver que podemos, desempolven sus códigos militares y esperemos que nos preparen bien.

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