El primero de mayo se mezclaron en la Asamblea Legislativa elementos trágicos y cómicos que hicieron reir a algunos, llorar a muchos, y enfurecer a los movimientos de trabajadores (as) del país. Una verdadera tragicomedia en tres actos se vivió durante la elección del actual directorio.
Al inicio del primer acto, las diputadas de diferentes partidos alzaron su voz en pro de la igualdad de derechos de las mujeres para tratar de garantizar la presidencia del Directorio a una de ellas. Finalmente, y algunas de las más vehementes terminaron votando por uno de los diputados de su partido o bien proponiendo al susodicho con bombos y platillos. Sin embargo, al día siguiente, una diputada se vistió de traje entero de hombre para poner en evidencia la desigualdad que sufrieron las mujeres en los puestos de elección.
El Directorio quedó constituido -sin ninguna sorpresa- tal y como había sido pactado en el anterior primero de mayo del 2015; en aquel entonces Liberación votó por el PUSC, en este 2016 tenía que devolverse el favor concedido y la Unidad Social Cristiana vota por Liberación, con una pequeña artimaña ( con el fin de ocultar la alianza bipartidista) de dejar los votos en blanco para que se le sumen al que tenga mayoría. De esta manera ha continuado vigente el viejo bipartidismo firmado en 1995. El PLUSC se entroniza una vez más en la Asamblea Legislativa a pesar de haber sido rechazado por los votantes en la última elección presidencial.
Desde luego, todas las alianzas han sido silenciosas y los papeles han ido y venido debajo de la mesa; las mejores horas para pactar son durante la noche, así se evita toda transparencia y fuga de información.
Durante el segundo acto, el directorio incluye a otros personajes de la política: los llamados “cristianos” y al Movimiento Libertario. Lo importante es garantizar que la ofensiva contra el empleo público sea demoledora en nombre del déficit fiscal. Pactan una vía rápida para aprobar “ la Ley para racionalizar el gasto público”, y realizar “una reforma integral a los diversos regímenes de pensiones”. La cruzada abre la puerta a la privatización de instituciones y a los procesos de concentración de la riqueza, lo cual aceleraría aún más la desigualdad social que vive el país. El corolario sería el recorte de derechos históricos y constitucionales, tales como el derecho al empleo y a la negociación colectiva.
De lo que está prohibido hablar en el nuevo directorio- bajo pena de caer en desgracia- es de la enorme evasión de impuestos que se da en el país y mucho menos de la inmensa fuga de capitales al extranjero, se ha convertido incluso en mala palabra hablar de los “Papeles de Panamá”.
Lo más importante en este tipo de alianza, es lanzar la mirada hacia el 2018, y empezar a saborear desde ahora las mieles del poder, siempre y cuando no se toquen las arcas de los potentados del capital financiero, en su lugar hay que iniciar una política de austeridad y desempleo para miles de asalariados. Países como España, Grecia, Portugal… son los modelos a seguir para la mayoría de los diputados (as).
En el tercero y último acto, con el nuevo directorio legislativo ya constituido, ha sido instaurada en la Asamblea la Congregación del Santo Oficio. Los mal llamados “cristianos”, han pactado con el PLUSC una lista de pecados capitales: serán considerados herejes y candidatos a la hoguera, quienes promuevan los derechos sexuales y reproductivos, la fecundación in vitro (FIV), y el matrimonio entre las personas del mismo sexo. Desde luego hay que añadir a la lista a quienes promuevan la igualdad de género, pues en puestos de dirección las mujeres no pueden ir más allá ( como ocurrió en este directorio ) de ser escolta de sus compañeros diputados. Al fin y al cabo hoy como ayer, sigue vigente la figura de la bruja incapaz de raciocinio,poseída por múltiples prejuicios que obnubilan su mente y su corazón. Quien no estuviere de acuerdo con la lista mencionada, será catalogado de ateo (a) y será objeto de persecución permanente por este Santo Oficio.
Lo mismo que en la Edad Media la pena por herejía será la excomunión, y por tanto los y las herejes se convierten en enemigos del Estado. El nuevo directorio convertido en Tribunal del Santo Oficio, se ha erigido en poder supremo policial para juzgar y condenar a los blasfemos y para iniciar su proceso de condenación.
Este primero de mayo del 2016, será considerado gracias a nuestra Asamblea Legislativa, una verdadera tragicomedia por la burla de que ha sido objeto el honorable público, por la trama de engaños de sus personajes actuando detrás del telón para ocultar sus mezquinos intereses; se desdicen de sus juramentos cuando el poder de su partido está en juego y pone en riesgo el botín electoral del 2018. La parodia, el sarcasmo y el cálculo político-financiero han quedado evidenciados en este poder de la República que antaño fue llamado “el sagrado recinto de los padres de la Patria.” “Cosas veredes amigo Sancho”.