Los incendios forestales casi a diario respiran en distintas partes de nuestro sufrido planeta; por ejemplo las llamas en la selva amazónica, que durante el mes de agosto del presente año robaron el asombro de todo el mundo.
Esas “series de incendios afectaron principal- mente la región de la amazonia legal de Brasil y otras partes del bioma amazónico, como Bolivia y Perú, así como a zonas de otros biomas no amazónicos (bosque tropical húmedo en Paraguay y Argentina).
La Amazonia es el bosque tropical más extenso del mundo; se considera que su extensión es de siete millones de kilómetros cuadrados, repartidos entre nueve países de la parte central y septentrional de América del Sur. Solo en agosto las llamas consumieron 2,5 millones de hectáreas, según el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales de Brasil (INPE).
Durante el transcurso del 2019, en distintos países de Latinoamérica los pueblos demostraron su inconformidad con sus dirigentes políticos; tal como en Haití, Puerto Rico, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Venezuela, Costa Rica, Panamá, Argentina, Perú, Uruguay y Brasil. Durante estos últimos meses en cuatro países de Sudamérica la crisis sociopolítica se ha vivido con mayor realce que en los otros países latinos.
En Ecuador, Chile, Bolivia y Colombia el pueblo ha protestado sin temor en las calles; estas manifestaciones han sido verdaderas epidemias.
América Latina cierra una década con enorme crisis sociopolítica, provocada por “profunda desconfianza, y el descontento con numerosas políticas gubernamentales ha ayudado a mantener la viral movilización de la ciudadanía”. Después de los incendios forestales del Amazonas, en estos últimos cuatro países mencionados dio inicio el megaincendio sociopolítico que ha provocado: llanto, luto, enemistades, des- trucción y desesperación entre amistades y familiares.
Las protestas en Ecuador fueron del 2 al 13 de octubre de 2019, “tras el anuncio de ciertas medidas económicas por parte del gobierno de Lenín Moreno, y se desarrollaron como protestas en contra de las medidas y del Gobierno”.
La ciudadanía no aceptó las “nuevas medidas económicas” y decidieron unirse para salir a las calles a protestar. Por su parte, Santiago y las principales ciudades de Chile se han inundado de protestas desde octubre: “el pueblo salió a las calles por el aumento del precio para los billetes del Metro, pues pasaron de 30 pesos a 830 pesos…”. En Bolivia las manifestaciones fueron provocadas por la ambición del exdictador Evo Morales. “El 20 de Octubre, luego de la primera vuelta en las elecciones, Evo Morales quedó primero.
Sin embargo, para quedarse con la presidencia sin necesidad de una segunda vuelta, tendría que sacarle al menos diez puntos al segundo candidato y, aunque en un principio no le logró sacar esa diferencia, sorpresivamente el sistema se cayó y, cuando volvió, Morales tenía esos diez puntos de ventaja.
De esta forma, el líder de la oposición, Carlos Mesa, no reconoció los resulta- dos de las votaciones, por lo que solicitó un recuento…”.
Tras casi 14 años en el poder, el domingo 10 de noviembre Evo Morales renunció a la presidencia de Bolivia, esa decisión fue el mejor presente de Navidad y fin de año que le regaló a su patria.
Es sorprendente cómo el hombre se obsesiona por poder y dinero, este dictador quería eternizarse en la presidencia pero el jefe de las Fuerzas Armadas, el general Williams Kaliman, le dio estupenda sugerencia a Morales.
Las fuerzas Armadas de Nicaragua y Venezuela deben imitar dignamente a este admirable general.
El ejército debe estar a favor del pueblo siempre, el pueblo les paga para no permitir el atropello de sus derechos, ya que algunos políticos ineptos se enferman cuando saborean el poder. En los países donde existe tiranía los jefes de las fuerzas armadas viven ciegos e inconscientes. Por otro lado, el portal web noticiasopinion.com señala sobre las protestas de Colombia: “El 21 de noviembre se dio un gran Paro Nacional en Colombia, que se realizó con el fin de exigirle al Gobierno de Iván Duque un cambio de rumbo, además de varias reformas significativas en cuestiones de salud, educación, seguridad y medio ambiente.
Además, se protestó por el considerable aumento en casos de corrupción y los asesinatos de líderes sociales. Por su parte, varios grupos de manifestantes señalan que lo que en realidad generó el apoyo masivo para el Paro Nacional, fue la filtración de la muerte de 8 menores de edad en un bombardeo, del Ejército en contra de grupos al margen de la ley…”
