La investigación en el campo de las Humanidades y las Ciencias Sociales encuentra en la labor de Adolfo Constenla Umaña uno de los principales referentes en la Universidad de Costa Rica y en la región latinoamericana. Sus aportes se centran en el estudio de las lenguas indígenas de Costa Rica, en su participación en la creación de la revista Estudios de Lingüística Chibcha y en el desarrollo de material didáctico, más concretamente, los alfabetos para lenguas indígenas. Sus trabajos se centran en el análisis de las lenguas y de la cultura bribri, térraba, malecu, guaymí, boruca, nove y bocotá, entre otras.
Sus investigaciones fueron publicadas en libros y revistas nacionales e internacionales, aparecen en la Encyclopedia of Language and Linguistics; en Concise Encyclopedia of Language and Linguistics, donde se distingue su trabajo “Costa Rica: Language Situation” y en la colección The World of Linguistics, en la que publicó su trabajo “Chibchan Languages”. Ellas se caracterizan por un riguroso y científico abordaje de los diferentes niveles y variables de las lenguas analizadas.
Este distinguido filólogo y lingüista supo vincular con pertinencia los resultados de sus investigaciones para proyectarlos en la sociedad costarricense y, particularmente, en aquellas personas interesadas en conocer, explicar y cuidar las culturas indígenas. De ahí su compromiso y afán didáctico al escribir obras como Abecedario ilustrado térraba, Abecedario ilustrado malecu, Abecedario ilustrado bribri, Tärä Ngäbere: Libro guaimí (en colaboración con Rafael Bejarano) y Ata malecu jaicaco. Escribamos en idioma guatuso (coautor Eustaquio Castro). A esta labor se le suman el rescate y el análisis de las narraciones tradicionales y la literatura oral en la que interactúan la naturaleza, los dioses y diversos personajes míticos. Lo anterior puede observarse en sus libros Poesía tradicional indígena costarricense y Leyendas y Tradiciones Borucas.
Constenla siempre tuvo la convicción de que su trabajo académico debía servir para el mejoramiento de las condiciones de vida de las personas y de las comunidades, de ahí su dedicación a ese pilar fundamental de la Universidad de Costa Rica: la acción social. Su constante contacto e interacción con grupos indígenas y las actividades de capacitación que preparó para ellos le permitió hacer realidad la misión formativa y transformadora de la Institución.
Finalmente, deseo destacar el aporte de la labor de don Adolfo Constenla para comprender a Costa Rica como una república multiétnica y pluricultural, adelantándose incluso a la reforma del artículo 1 de nuestra Constitución Política. Sus hallazgos constituyen uno de los principales legados para explicar nuestros procesos identitarios y entender que Costa Rica no es un país homogéneo culturalmente, que su mayor riqueza reside en la diversidad de lenguas, culturas, visiones de mundo y aspiraciones humanas. Por ello, y por la escuela de investigación que ha generado en quienes siguen su ejemplo, hoy ostenta un lugar de privilegio y reconocimiento en las letras y en la cultura costarricenses.
