Con más del 99% escrutado, en lo que respecta a la contienda para el parlamento europeo, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) logró una rotunda victoria con el 32,84% de los votos y 20 diputados. Le sigue el derechista Partido Popular (PP) con 12 diputados y el 20,13%. Ciudadanos (Cs) será la tercera fuerza, con el 12,18% y 7 eurodiputados, Unidas Podemos se hace con el 10,05% de los votos y 6 escaños. VOX entra en la Eurocámara con 3 diputados y el 6,20% de los sufragios. La agrupación que mejores resultados relativos obtiene es Cs, agrupación liberal de derecha.
A escala municipal, son emblemáticas las derrotas de la “izquierda” en las dos ciudades más pobladas: la de la alcaldesa Carmena en el corazón del Estado de Madrid, y la de la alcaldesa Ada Colau, en la ciudad industrial clave de Barcelona. Ambas tránsfugas de Podemos.
No obstante, a escala nacional municipal, se mantiene en la punta el PSOE, partido imperialista con disfraz de “izquierda”. El PP del anterior presidente Mariano Rajoy pierde 7 puntos porcentuales frente al PSOE (en relación a las elecciones del 2015).
El voto por el PSOE no debe interpretarse como un voto ilusionado, con confianza, es ante todo, un voto “útil” para frenar a la derecha. Pues, al mismo tiempo, se reconfirma el importante avance del “trifachismo” PP, VOX y Cs. Aunque la votación que obtuvo VOX no llena las expectativas que alardearán sus portavoces, la formación protofascista sigue siendo un grave peligro. VOX ganó las elecciones en 6 municipios.
En el otro lado del espectro electoral, se debilita, cada vez más, Unidas Podemos, que lidera Pablo Iglesias, agrupación que ha sido la más damnificada del superdomingo electoral. La formación morada ha perdido diputados municipales en todas las comunidades llamadas a las urnas. En total, han bajado 42 diputados en toda España (62 si tenemos en cuenta los 20 conseguidos por Más Madrid en la comunidad). Y encima de ello, Pablo Iglesias, sigue con su política lamentable de suplicar una alianza con el PSOE para hacer co-gobierno.
La táctica de Unidas Podemos de formular un discurso cada vez más moderado, sometido al régimen y a la UE , como ejemplos: tener una postura titubeante frente al justo derecho a la independencia de Catalunya y callarse la boca frente a la política “proyanki” ante Venezuela, por parte del presidente del PSOE Pedro Sánchez. Todos esos blanqueos, no le sirvieron para captar más votos. Todo lo contrario, fue un tiro por la culata. Ese es el callejón sin salida del reformismo timorato de clase media. Y explica también, en buena parte, el avance de la derecha liberal de Cs (que es el más notable) y la de la ultraderecha de VOX, luego de tanta desilusión en esa agrupación de izquierda posmoderna, que aparentaba en sus inicios una alternativa radical frente a la crisis.
Es hora de hacer un balance a profundidad y sacar conclusiones para lo que viene.
