Quisiera iniciar esta carta felicitándolo a usted y a su partido por el triunfo que han obtenido. Están haciendo historia, pero esperemos que esa historia sea positiva. Esperemos que se dejen atrás, pero resueltas, todas las manchas del Gobierno anterior para así iniciar este, su gobierno, con el pie derecho.
Hoy celebro su triunfo, pero no celebro el triunfo del PAC. Debo aclarar que mi voto no se lo di a esta agrupación política. Al igual que muchos costarricenses que no formamos parte del partido del cual usted es miembro, mi voto se lo di a usted, Don Carlos. Le hemos dado un voto de confianza a usted como persona, como posible generador de cambio ante lo que estaba en la acera del frente y ante la difícil situación de nuestro país en varios aspectos. Le dimos un voto de confianza para salir adelante. Más de un millón de personas pensamos que usted representa una mejoría para el país, un cambio en el círculo vicioso de la política en el cual estamos inmersos y del que queremos desesperadamente salir. En usted vemos la oportunidad de romper esos esquemas partidarios que nos han traído al punto de crisis en el que nos encontramos.
Este triunfo lo celebraré al final de su gobierno, cuando vea el análisis y los resultados de los cuatro años en lo que usted estará al frente del país. Yo sé que mucho del trabajo, de lo que avance o no avance en el país, pasa por la Asamblea Legislativa. Por ello, espero que ese gobierno nacional del que tanto se habló en campaña sea una realidad, que llegue a consensos que beneficien al país y no solo a unos pocos grupos que sabemos que, de una u otra forma, son quienes mueven los cables para manejar a este país.
Espero celebrar dentro de cuatro años al ver una reducción real de la pobreza. Espero celebrar el aumento en el empleo y, por añadidura, la reducción en el desempleo. Espero ver mejorar en los préstamos bancarios para emprendedores. Espero ver mejoras en las condiciones laborales y de producción para los productores nacionales. Espero ver una reducción real de la corrupción y, además, la penalización de los corruptos. En cuatro años, espero celebrar que no tengamos la misma presión con el déficit fiscal, que se haya podido reducir significativamente la deuda externa e interna. Espero muchas cosas y no pretendo escribirlas todas. Espero celebrar que Costa Rica se desarrolle como un país de primer mundo.
Borrón y cuenta nueva, es lo que ha dicho. Como presidente del bicentenario, lo esperan muchos retos y no debería pasar desapercibido; debe hacerse notar, su trabajo debe hacerse notar, pero para bien, para beneficio del país.
Espero celebrar en cuatro años haber hecho un voto correcto. Espero que usted, Don Carlos, sea lo que esperamos la gran mayoría de los costarricenses que lo elegimos como el presidente del cambio. Esperamos ese cambio del que tanto usted habló. El PAC tiene una deuda enorme que pagar y espero que al final de cuatro años esa deuda sea cancelada y remunerada en forma de desarrollo y oportunidades para el país.
