Al salir de los supermercados, vemos revistas de apartamentos y residenciales que se edifican en varias ciudades. Sin embargo, los precios sobrepasan los $100 000, más de ₡55 millones. ¿Cuántos pueden comprar una vivienda al contado? Para los jóvenes recién graduados y/o recién casados, adquirir una vivienda implica endeudar la vida terrenal y el alma al banco.
Arnoldo Mora y Miguel Picado nos recuerdan que Monseñor Thiel Hoffman puso sobre la mesa el tema de la habitación. Esto sigue vigente siendo los apartamentos carísimos cada vez más pequeños, sin olvidar los tugurios y las personas indigentes. Se debería tratar el Acceso Universal a la Vivienda (AUV) a través del Instituto Nacional de Vivienda y Urbanismo (INVU) para que el mayor número de personas y familias acceda a una vivienda sin tener que endeudar su vida de por medio.
No voy a proponer que se regalen viviendas a diestra y siniestra, ya que hay reportes sobre familias venezolanas que alquilaron y vendieron viviendas que el gobierno venezolano les dio gratuitamente (al parecer, las inmobiliarias estuvieron detrás). Ante este escenario, se plantea conceder a las familias e individuos costarricenses una licencia de uso de una vivienda. De manera similar en que financiamos el Seguro Social, empleadores, empleados y Estado cotizarían para financiar el AUV. Seguidamente, el INVU recibiría y gestionaría las cotizaciones para proveer nuevos multifamiliares. Esto no impedirá a empresas constructoras contribuir al INVU porque probablemente sus capacidades no darían abasto a la demanda, tal como ocurre con los hospitales de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) y con las universidades públicas.
Por los adultos mayores, las puertas en las viviendas deben ser más grandes que el tamaño estándar para que una silla de ruedas con pedales pase de lo más bien. Cada torre de apartamentos debe contar con al menos dos ascensores (por si uno falla) y con escaleras de emergencia. La Ley 7600 de igualdad de oportunidades para personas con discapacidad no se aplica actualmente al tamaño de las puertas.
Al respetar la propiedad privada existente, el INVU debe tener la posibilidad de adquirir tierras y propiedades para nuevos multifamiliares como ya lo hace.
Un subtema importante es la ubicación y uso. Las consultas entre empleadores y empleados en la mesa del INVU ayudarán a identificar el lugar de habitación más conveniente para los trabajadores, al tomar en cuenta las opciones de traslado. Por otra parte, las viviendas cercanas a las universidades deberían destinarse a estudiantes y docentes que requieran ubicarse cerca de ellas. En China, escuelas, colegios y universidades cuentan con dormitorios en sus recintos. Debido a que la cama, el escritorio y el armario son espacios muy personales, una habitación por estudiante es lo ideal, como en Suecia y en República Checa. Los cuartos de duchas y los de inodoros de doble descarga son accesibles en los pasillos de cada piso. Esta modalidad simplifica su limpieza.
Las viviendas deberían tener conexión a Internet vía fibra óptica preinstalada. Además, en un futuro no lejano llegará el Internet inalámbrico Li-Fi, aspecto a tomar en cuenta en la arquitectura.
El derecho a una vivienda está presente tanto en el artículo 25.1 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos como en el artículo 11 del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de la ONU, ratificado por Costa Rica en el 2014.
Me adelanto a cristianos y liberales que acusen el AUV de populismo para impedir su implementación: se trata de una solidaridad inspirada tanto en los Derechos Económicos Sociales y Culturales (DESC) como en Mateo 25:31-46, donde el Rey del Juicio final pide atender a los desamparados. El AUV implica realizar masivamente lo que el Rey del Juicio desea. Las iniciativas “Un Techo para mi País” y “Chepe se baña” fueron pequeños bacheos. Una mayor cotización por parte de quienes poseen chozones de lujo ayudará a ser solidarios con quienes no tienen techo. Jesús dijo que es muy difícil para los ricos entrar al Reino (Marcos 10:23); por ello, apoyar el AUV les da una oportunidad de acercarse al Cielo.
El AUV busca suplir la necesidad de vivienda. Junto al justo salario, la vivienda fue un reclamo del Obispo Thiel en la Costa Rica liberal de finales del Siglo XIX. Al tratarse de una necesidad de primer nivel, el Acceso Universal a la Vivienda merece un capítulo en nuestra Constitución Política. Decepciona que este tema brille por su ausencia. ¿Cuál candidato respaldará el AUV?
