Este lunes dimitió Romero Jucá como ministro de Planificación del gobierno provisional de Brasil, luego de que se hizo pública una conversación en la que expresó la necesidad de poner fin al gobierno de Dilma Rousseff, para detener una investigación por corrupción.
El connotado diario Folha de São Paulo publicó el lunes 23 de mayo el texto íntegro de la conversación -aunque no la grabación misma- y horas después dimitió Jucá.
La publicación de Folha, -que repercutió en medios internacionales como la BBC, The Guardian o el sitio de periodismo investigativo The Intercept– evidenció una conversación entre Jucá y Sérgio Machado, un exsenador quien hasta hace poco presidió la empresa estatal de petróleo Transpetro.
En ella, Jucá y Machado se refieren al menudo problema de que ambos son investigados como parte del escándalo de corrupción denominado “Lava Jato”, o “Car Wash”, sobre sobornos y lavado de dinero en el gigante estatal petrolero Petrobras.
Así, Jucá propone que la salida debe ser política y expresa: “tenemos que para esta mierda (…) tenemos que cambiar al gobierno para detener este sangrado”. Machado no sólo estuvo de acuerdo sino que añadió: “la solución más sencilla es poner a Michel (Temer)”.
GOLPE
De acuerdo con Folha, la conversación se dio en marzo, semanas antes de que el 11 de mayo el Senado brasileño decidiera apartar a Rousseff del poder por 180 días.
Esa decisión se tomó ante una acusación no demostrada en su contra y ante la cual no ha tenido formalmente oportunidad de defenderse. Fue precisamente Temer quien asumió el puesto de presidente.
Rousseff supuestamente manipuló fondos de bancos públicos para maquillar el déficit fiscal y cubrir programas de responsabilidad del gobierno. La expresidenta calificó su suspensión del cargo como “un golpe jurídico y político”.
