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El coronavirus mantiene el mercado del petróleo bajo tensión

Las predicciones de la OPEP para la demanda mundial de petróleo no han cambiado para este año, con una caída esperada de 9,5 millones de barriles diarios, pero espera que un invierno frío en el hemisferio norte cambie la tendencia.

El aumento de casos de COVID-19 mantiene al mercado del petróleo en tensión, aunque la previsión de que el invierno sea más frío podría hacer subir los precios del barril, apuntó el martes la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).

“Los actuales rebrotes regionales de COVID-19 van a influir en la moral del mercado, al menos hasta que haya una vacuna”, explicó la organización en su informe mensual.

“Sin embargo, las previsiones que anuncian un invierno frío para este año podrían contribuir a aumentar [el precio del barril] en el hemisferio norte”, añadió.

Las predicciones de la OPEP para la demanda mundial de petróleo no han cambiado para este año, con una caída esperada de 9,5 millones de barriles diarios (mbd), quedándose en 90,3 mbd.

Para 2021, por el contrario la demanda ha sido analizada a la baja en 0,06 mdb: la OPEP espera un repunte de 6,5 mbd y que se alcancen los 96,8 mbd. Lo que refleja unas perspectivas de crecimiento económico más débiles, tanto en los países desarrollados de la OCDE como en el resto.

En cuanto a la oferta, la estimación de la producción de países externos a la OPEP ha sido recalculada al alza en 0,31 mdb para este año, ante una recuperación de la producción de hidrocarburos líquidos en Estados Unidos más importante de lo esperado.

La producción de los países que no integran la OPEP se prevé más baja para el año que viene, 0,11 mdb menos.

En septiembre, la producción de los países de la OPEP retrocedió en 47.000 barriles al día con respecto a agosto, estableciéndose en 24, 106 mdb, según afirman fuentes indirectas citadas en el informe.

Porque aunque países de la OPEP como Irak o Arabia Saudita han producido más que antes, Emiratos Árabes Unidos extrajeron menos.

Los miembros de la OPEP y sus aliados, entre ellos Rusia, se han impuesto reducciones en la producción como respuesta a la caída de la demanda y los precios que ha provocado la pandemia de covid-19.

Los precios se había desplomado con la crisis (que dejó casi paralizado el tráfico aéreo mundial) y se estabilizaron después a niveles relativamente bajos. El barril de Brent del mar del Norte costaba el martes poco más de 42 dólares.

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