La policía brasileña ejecutó la mañana de este jueves más de cincuenta órdenes de allanamiento en el Congreso y otras direcciones de Brasilia, en el marco de una investigación que investiga al senador Fernando Bezerra Coelho, articulador del gobierno del presidente Jair Bolsonaro.
La operación Desintegración busca “desarticular un esquema criminal de pagos para obtener ventajas indebidas, por parte de las constructoras y favoreciendo a autoridades públicas”, informó la Policía Federal en un comunicado.
Bezerra Coelho (MDB, centro) y su hijo Fernando Coelho Filho (DEM, centro) son blancos de la investigación iniciada en 2017 y que indaga irregularidades en un proyecto del cambio de curso de un río en el noreste del país, en la época en que Bezerra Coelho era ministro de Integración Nacional (2011-2013) de la presidenta Dilma Rousseff (PT, izquierda), afirmó la televisora Globonews.
El Supremo Tribunal Federal (STF) autorizó la operación, afirmó la policía, que informó que datos brindados por colaboradores fueron el punto de partida de la misma. “Los colaboradores confirmaron que el pago a autoridades públicas para obtener ventajas indebidas entre los años de 2012 y 2014 fueron realizados por constructoras que estaban ejecutando obras costeadas por recursos públicos”, dijo la policía.
El senador Bezerra, en cargo desde 2015, fue nombrado por Bolsonaro en febrero como el líder del gobierno en el Senado, con la responsabilidad de articular con los bloques aliados al gobierno la votación de proyectos de interés del Ejecutivo.
Este jueves, policías fueron también hasta su residencia en Brasilia para cumplir una de las órdenes de allanamiento.
Su asesoría de comunicación emitió una nota en la que su abogado cuestiona la “contemporaneidad” de la acción policial. “La única justificación del pedido [de allanamiento] sería en razón de la actuación política y combativa del senador contra determinados intereses de los organismos de persecución penal”, dice el texto.
El presidente del Senado, Davi Alcolumbre, dijo a Globonews “lamentar” la operación en la sede del Legislativo pero aseveró que la misma no interrumpirá la agenda del día.
