Mundo Violencia de género: una pandemia en la sombra

América Latina y el Caribe contabilizó 12 femicidios por día en 2021

En el Día Internacional de Eliminación de la Violencia contra la Mujer la CEPAL recuerda la necesidad de redoblar esfuerzos para que las mujeres y niñas de la región puedan ejercer verdaderamente su derecho a vivir una vida libre

El feminicidio es la máxima expresión de desigualdad, discriminación y de las múltiples formas de violencia contra las mujeres y las niñas. Se estima que al menos 4.473 mujeres fueron víctimas de femicidios durante el año 2021 en América Latina y el Caribe, según el Observatorio de Igualdad de Género de América Latina y el Caribe (OIG) de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), lo que significa 12 muertes violentas por razón de género cada día.

Claramente esta es una pandemia que se encuentra en las sombras y que arrasa con miles de mujeres en todo el mundo y que deja familias destrozadas y sociedades sumamente heridas. De acuerdo con la Comisión las encuestas nacionales de la región revelan que entre el 60% y el 76% de las mujeres -alrededor de 2 de cada 3- han sido víctimas de violencia por razones de género en distintos ámbitos de su vida.

Solamente en 2021, de los 18 países o territorios de América Latina que proporcionaron información sobre esta problemática, 11 presentaban una tasa igual o superior a 1 víctima de femicidio por cada 100.000 mujeres.

De hecho, las mayores tasas de femicidio por cada 100.000 mujeres se presentaron en Honduras, con un estimado de 4,6 casos, en República Dominicana con 2,7 casos, El Salvador, sumó 2,4, Bolivia alcanzó 1,8 casos por cada 100.000 mujeres y Brasil un total de 1,7 casos.

En el Caribe, un total de 28 mujeres fueron víctimas de violencia letal de género en 11 países y en los territorios que entregaron información correspondiente a 2021. Belice y Guyana presentaron las mayores tasas de femicidio o feminicidio en el Caribe, con 3,5 y 2,0 por cada 100.000 mujeres, respectivamente.

“Las cifras que hoy presentamos sobre femicidios en América Latina y el Caribe son inaceptables. Nuestra obligación es redoblar esfuerzos para que las mujeres y niñas de nuestra región puedan ejercer verdaderamente su derecho a vivir una vida libre de violencia y discriminación”, dijo José Manuel Salazar-Xirinachs, Secretario Ejecutivo de la CEPAL.

Esta información se presenta en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer que se celebra cada 25 de noviembre y que da inicio a 16 días de activismo hasta el 10 de diciembre, Día de los Derechos Humanos con una campaña informativa sobre los impactos de este flagelo.

De acuerdo con la CEPAL, en 10 países de América Latina -de 18 analizados- las tasas de femicidio se mantuvieron iguales o superiores a 1 caso por cada 100.000 mujeres entre 2019 y 2021: Argentina, Bolivia, Brasil, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Paraguay, República Dominicana y Uruguay.

Por su parte, las adolescentes y jóvenes de entre 15 y 29 años concentran la mayor proporción de casos de femicidio, de acuerdo con datos de 16 países y territorios de la región entre 2019 y 2021. Más de un 4% del total de esos delitos corresponden a niñas menores de 14 años.

Además, en 2021 al menos 781 niñas, niños y adolescentes y otros dependientes perdieron a su madre o cuidadora a causa del femicidio en solo 10 países de la región que cuentan con datos al respecto. “Este número revela el gran impacto que tiene la violencia de género no solo en las mujeres víctimas, sino también en sus familias, la comunidad y la sociedad en su conjunto”, subrayó.

La CEPAL es enfática en que se requiere atender de manera urgente esta pandemia en la sombra basada en cuatro factores determinantes, como son el financiamiento, la prevención, la respuesta pública y el establecimiento de sistemas de información.

Semanas atrás, la XV Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe, los Estados miembros de la CEPAL se comprometieron a lograr una recuperación transformadora con igualdad de género orientada a la sostenibilidad de la vida y transitar hacia la sociedad del cuidado.

Esto pasará por adoptar e implementar leyes, políticas, planes de acción integrales y multisectoriales, así como programas educativos de sensibilización, que permitan prevenir, atender, sancionar y erradicar las formas de violencia.

 

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