Alemania se declaró “reacia” al pedido de Estados Unidos de participar en una misión de protección en el estrecho de Ormuz, que podría complicar los esfuerzos europeos para alcanzar una solución diplomática con Irán, indicó el miércoles una portavoz del Gobierno.
“La prioridad debe ser, en nuestra opinión, los esfuerzos diplomáticos y la desescalada” de la crisis de los petroleros entre Teherán y Londres, declaró Ulrike Demmer en una rueda de prensa en Berlín.
“El Gobierno alemán es reacio a la propuesta concreta de Estados Unidos y es por eso que no propuso participar en ella”, precisó, pues “el enfoque global de nuestra política respecto a Irán difiere claramente del enfoque actual de Estados Unidos”.
El 19 de julio Irán capturó un petrolero sueco con bandera británica que estaba en la zona.
Previamente fuerzas navales británicas se apoderaron de un petrolero iraní en Gibraltar.
Las tensiones en el Golfo se han incrementado además por misteriosos ataques contra otros petroleros. Estados Unidos atribuye la responsabilidad a Irán, que desmiente cualquier implicación.
Washington acentuó la presión sobre Alemania y otros socios europeos, como Francia y Reino Unido, para que participen en una misión de protección liderada por los estadounidenses.
Londres solicitó que se ponga en marcha una “misión de protección marítima” europea en el Golfo, ante la que el ministro alemán de Relaciones Exteriores, Heiko Maas, mostró sus reservas. Francia, en cambio, no descartó desplegar medios militares suplementarios.
Aún así, Alemania no excluyó totalmente esta posibilidad y la portavoz del Ejecutivo precisó que “hablaremos sobre este tema con nuestros socios europeos, Francia y Reino Unido particularmente”.
