El candidato presidencial del Partido Liberación Nacional (PLN), José María Figueres, volvió a comparecer ante la prensa casi 10 días después de su triunfo en primera vuelta en las elecciones del 6 de febrero, con un llamado a priorizar la discusión sobre propuestas y equipos antes del balotaje del 3 de abril.
Figueres, que obtuvo medio millón de votos en primera ronda y debe enfrentar sorpresivamente a Rodrigo Chaves, de Progreso Social Democrático (PPSD), dijo que pasó varios días evaluando el resultado electoral y ajustando preparativos para las siete semanas siguientes con los equipos que le rodean.
El candidato verdiblanco reapareció tras reunirse con los diputados electos del partido, que tendrá la bancada más grande en la composición legislativa entre 2022 y 2026, lo que considera una ventaja para un eventual gobierno a partir del 8 de mayo.
En esta línea hizo el llamado Figueres a que en la campaña restante se discuta sobre los equipos que rodea a cada candidato, un punto que el liberacionista considera un punto a su favor, tanto como el programa de gobierno reconocido como el más completo por un análisis que hizo el Programa Estado de la Nación, exaltó el expresidente.
“Aquí no hay margen para volvernos a equivocar con otro experimento. Ya lo hemos tenido en las dos últimas administraciones; independientemente de la mejor voluntad de las personas, los experimentos políticos no han salido (bien). Como consecuencia de eso estamos con el desempleo más alto de nuestra historia y de los países de América Latina, con la pobreza más alta de nuestra historia (…) Seria una extraordinaria muestra de respeto a los costarricenses que se presentaran los equipos responsables de las distintas áreas y que serán responsables del rescate de este país”, dijo Figueres.
De esta manera Figueres lanza una indirecta a Chaves, al considerarlo una suerte de experimento, al carecer él de experiencia política en el país y al representar a un partido completamente nuevo, con nueve escaños para el próximo cuatrienio. El propio Chaves ha rechazado mostrar a su equipo diciendo que convenía primero recibir el voto y luego elegir él a la mejor gente.
Ante el llamado de la campaña de Chaves de pactar una “campaña de altura”, en aparente alusión a evitar los ataques personales, Figueres señaló lo que para él significa ese concepto y la lista de falencias que ve en su adversario. “Una campaña de altura significa respetar la democracia, significa respetar la institucionalidad, significa respetar el Estado social de derecho”, dijo sobre uno de los puntos de inquietud de sectores escépticos con el exministro de Hacienda.
En temas concretos, Figueres reiteró el apoyo al proyecto de Ley Marco de Empleo Público que espera un segundo debate en la Asamblea Legislativa, con los diputados actuales. “Hemos dicho que estamos de acuerdo con la legislación que tiene que ver con empleo público porque no es retroactivo y no afecta intereses de ningún trabajador del Estado”.
Añadió que después de aprobado, el proyecto podría ser objeto de cambios que podrían negociarse para mejorarlo, como parte de medidas que permitirían cumplir con el acuerdo pactado por el gobierno actual con el Fondo Monetario Internacional (FMI), una herramienta que cuenta con el apoyo de Figueres.
