Un grupo de 25 mujeres denunció públicamente al profesor Juan José Gómez, del Liceo Experimental Bilingüe La Trinidad, en Moravia.
Se trata de 25 exalumnas del colegio y una estudiante (cuyo nombre se mantiene en reserva) que actualmente está en una de sus clases. Algunas de ellas conservan las capturas de pantalla, audios y otras pruebas.
Estas son las denuncias, en primera persona, que hicieron públicas en Facebook y luego profundizaron en entrevistas con UNIVERSIDAD. Cabe aclarar que las denuncias son a nivel periodístico y no de carácter administrativo o judicial.
Lea también
25 exalumnas denuncian a profesor de colegio en Moravia por acoso sexual
“El MEP y el director del colegio me expusieron ante mi abusador”
1 – Khendy. Generación 2016
Yo fui estudiante en el Liceo Experimental Bilingüe desde 2012 hasta el 2016. Empecé y terminé ahí mi colegio, Él era el profesor de ciencias, al llegar a noveno me empezó a dar física y además fue mi profesor guía. El primer mensaje que recuerdo de él fue antes del baile de graduación aunque en persona siempre hacía comentarios inapropiados. Para el baile me puso un montón de mensajes diciendo que le gustaría haber estado ahí, por dicha no estuvo. Después de salir del colegio me siguió mandando mensajes y cuando yo lo bloqueaba o no le respondía, me escribía desde otra cuenta de Facebook, ya que tiene varias
2 – Valeria. Generación 2017
Estuve seis años en el cole. Salí hace dos años y a mí lo que me pasó con ese señor fue en décimo. En 2014 él empezó raro conmigo, yo apenas tenía 15 años. Nunca le puse atención, se lo comenté a una amiga. Pasaba cuando uno tenía dudas con la materia. Nos daba la práctica y uno iba al escritorio de él. Hacía comentarios inapropiados cuando uno le preguntaba algo. Ya después él empezó a enviarme solicitudes de amistad, yo ya sabía lo que quería entonces se las rechacé. Todos los mensajes de él diciéndome “hola linda” los borré. Todo mundo sabía cómo era él.
Él siempre se me quedaba viendo raro, sobre todo en los pechos. Uno se siente sucio, su mirada era muy notoria, pero yo ignoraba esas cosas. Una vez en clase, él estaba explicando algo y no sé por qué, fui y le hice unas preguntas en su escritorio. Él se volvió y me dijo: “mi fetiche sexual con las mujeres es que tengan los pies súper limpios”. Me asusté, ni siquiera le estaba hablando al respecto. Me comentó sobre sus fetiches sin que yo abriera la puerta para eso. ¡Ni siquiera había cumplido los 16 años.
3 – Daniela H. Generación 2016
El profesor Juan José fue profesor mío de sétimo hasta el último año. Siempre recibí un trato diferente junto a otra compañera. Cuando íbamos saliendo de clases se ponía a hacernos pregunta de la vida personal. Hacía comentarios pasados de tono, nos decía que estábamos muy lindas, que hemos crecido mucho y habíamos cambiado mucho físicamente. Cuando yo estaba en noveno me empezó a mandar mensajes por Facebook, yo me conectaba y tenía mensajes siempre de “Hola linda, ¿cómo estás?”.
Después no solo eran esos mensajes, me decía “me gustaría salir con usted”. Yo después cambié de Facebook. Siempre hacía esas cosas y hablaba de las mujeres, no eran comentarios normales. Siempre fue así. Pensé que era solo a mí, cuando se dio a conocer todo me di cuenta que hizo esto con muchísimas mujeres, exalumnas, madres de familia y estudiantes que aún están en la institución.
4 – Joselyn. Generación 2016
Me escribió hace aproximadamente cuatro meses o un poquito más. Yo no vi nada de malo que un exprofesor del colegio me escribiera un “Hola” pero cuando yo le respondí ya empezó a pasarse. Me decía que él desde que yo estaba en el cole me tenía ganas, yo no le contestaba y el siguió diciéndome que yo era mucha mujer para estar con el que hoy en día es mi comprometido, que yo debería de estar con él porque me podía hacer el trabajo sexual mejor que mi pareja.
5 – Natalia. Generación 2017
Fui estudiante de don Juan José desde 2015. Ese año él me puso una serie de mensajes por Facebook que, si mal no recuerdo, algunos eran tipo “Cómo te gustan los hombres?” o “¿Cómo te gustan los besos?” y cosas así. Toda la situación se llevó con la orientadora del colegio, y decidimos poner la denuncia en el MEP.
El proceso interno en realidad dejó mucho que desear. Por parte del MEP, me llamaron unas tres veces a declarar, pero nunca nos daban mucha información sobre el estado del proceso. De hecho, la resolución del caso no se nos informó de forma escrita, y nos dimos cuenta hasta que el profesor fue suspendido, no sabíamos que ya habían resuelto todo.
Se realizó todo el proceso, duró unos dos años más o menos, los cuales fueron muy incómodos ya que igual tuve que recibir clases con él. Al final, la resolución del caso fue una suspensión sin goce de salario por dos semanas y simplemente se cerró el caso.
Durante este proceso, las acciones tomadas por el colegio fueron únicamente decirle al profesor que bloqueara mis redes sociales, pero el resto siguió completamente normal. Luego de yo haberme graduado, don Juan José de todas formas volvió a enviarme varias solicitudes en Facebook para contactarme otra vez, las cuales rechacé por obvios motivos.
6 – Mónica. Generación 2010
Me di cuenta que él me observaba más de la cuenta, que me estaba acosando. Él medía la hora en que yo llegaba y cuando no llegaba, me escribía “mirá, hoy no te vi, ¿qué pasó?”. Yo lo empecé a ver extraño, él se da cuenta que me quedé en la clase de él y me dice que me puede ayudar. Yo no soy tonta, entonces le dije “¿con un trabajo profesor?” y él me dijo “yo le puedo ayudar a que pase inclusive el año”. Desde ese momento a mí me dio miedo ya que yo veía que sus intenciones eran otras.
Yo me acerqué a la orientadora del colegio y ella me ayudó más que el propio director, le conté lo que estaba pasando y ella empezó a darme seguimiento. En ese momento él viene y me pone un mensaje diciéndome “no te volví a ver en la clase”, entonces yo le dije “no profe, no voy a volver”. Él insistió en que me iba ayudar pero yo no le daba pelota, lo ignoraba y en uno de sus mensajes me dijo “qué lástima que se me va mi mejor adquisición”. Lo que él no sabía era que la orientadora ya estaba detrás del caso .
Cuando expuse el caso, el director me dijo que para él creerme necesitaba una prueba y me dio una grabadora. Me dijo “póngale un mensaje a ver si está en la institución y si es así dígale que ya va a llegar usted a la clase”. Yo me fui para la clase con la grabadora, él estaba solo y cuando yo llegué, él cerró la puerta, me dijo “siéntese acá” en un pupitre a la par del escritorio de él. Entonces yo comencé a preguntarle “profesor, ¿cuál es el trabajo que usted me va a dar para yo poder continuar con su clase?” y él con una risa de acosador asqueroso me dijo que “con un beso en ese mismo momento el podría solucionar mi trimestre” y después me dijo que si yo le daba sexo él me pasaba todo el año, que no tenía ni que preocuparme, solo que tenía que cumplir eso.
En ese momento él se me tiró encima del pupitre para darme un beso y me agarró a la fuerza. Fue ahí cuando yo no aguanté y vi que estaba expuesta, porque estaba sola en ese momento. Los adultos de la dirección en lugar de acompañarme o llegar después lo que hicieron fue exponerme a un abusador. Yo salí corriendo como pude, me lo quité de encima y me fui, llegué a la dirección con la grabación, la cual de nada me sirvió porque no es clave para un juicio porque es un “objeto manipulable”.
7 – Su nombre se reserva. Generación 2018
Él fue profesor mío de física-mate en décimo y duodécimo, siempre tuvo una preferencia notable por las mujeres por cómo las trataba, las veía y les explicaba, Entré a ese colegio en décimo, siempre anduvieron rumores de que él era un acosador, lamentablemente estos rumores siempre habían llegado a profesores y a la dirección pero nunca hubo respuesta de ellos.
Me iba muy mal en la materia de él y recuerdo que en el momento del promedio final pasé y lo único que dijo fue “espero que me pague de la mejor manera” con esa mirada repugnante.
Apenas salí del cole me empezó a escribir por Facebook, diciendo que si tenía novio, que dónde vivía, que qué estaba haciendo. Me decía que le gustaban las fotos que subía en vestido de baño, me decía que qué lastima que nunca me iba a fijar en él, etc, creo que casi la mayoría de las chicas de ese colegio hemos pasado algo similar con ese profesor, lamentablemente nunca dije nada a tiempo por miedo a perder la materia, el año o que hasta el mismo colegio me pudiera expulsar por “hablar mentiras de un profesor”.
8 – Carolina. Generación 2007
9- Menor de edad (su identidad se reserva)
Yo soy egresada de la generación 2016, actualmente tengo 20 años. La relación con el profe en el colegio siempre fue normal, nunca recibí algún tipo de acoso por parte de él. Sin embargo, sí tocaba temas sexuales y despectivos principalmente hacia las mujeres. Recuerdo que más de una vez, de hecho en clase, se unía al “chingue” de mis compañeros a tocar esos temas y usaba frases haciendo énfasis en que a él le gustaban los pechos de las mujeres y que las nalgas eran más que un adorno. Al menos en mi caso el acoso se presentó desde el año pasado. Me empezó a escribir normal, preguntando qué estaba estudiando y me preguntó si ya me había casado, en ese momento yo tranquilamente le respondía porque no veía ningún morbo, al momento que le dejé de responder empezaron los mensajes diciendo “hola guapa, qué guapa que estás, fuiste de las alumnas que más marcaron mi carrera, me hacés falta” y comentarios de ese tipo. Al menos en mi caso yo no discutí con él, ni le comenté nada más. Yo solo veía e ignoraba.
12 – Se reserva identidad. Generación 2009
Desde que yo entré al cole, como por ahí del 2004, él hacía esas cosas. Él era de acercársele a uno en clase, tratar de robar besos, de escribir como loco. Yo no entiendo cómo sigue dando clases. Yo me quedé en décimo entonces fueron tres años de tenerlo como profe. Conmigo empezó a tener una relación más de “compas”, en varias veces me dijo cosas que tenía unas piernotas, que me estaba poniendo muy guapa, que un día podíamos salir. Siempre hice como que no era conmigo para evitar. Él hace un mes estuvo mandándome invitaciones de Facebook pero yo todas las borré, porque ya uno sabe cómo es.
14 – Meleny. Generación 2017
Realmente lo mío fue solo por Internet, me mandaba mensajes, y lo hizo solo después de que saliéramos del cole, en el cole al menos hacia mí nunca me dijo nada. Yo nunca le contesté, entonces nunca se dio a más. En persona él nunca me faltó el respeto, lo único fueron los mensajes y fueron cuando fui egresada del cole.
15 – Fabiola. Generación 2010
Hace un tiempo, no recuerdo exactamente cuándo, el profesor Juan José Gómez me envió una solicitud de Facebook, fue profe mío en el cole, así que le acepté la solicitud. A los días me escribió “hola, ¿cómo estás?”, le respondí y no continuamos con la conversación. A los días y semanas me volvió a escribir y pensé que estaba buscando algo. Así siguió como una vez al mes, no le volví a contestar, lo tenía tachado como un viejo verde. Yo tenía conocimiento de que era un hombre casado. Jamás imaginé que había toda una comunidad de otras chicas acosadas por él. Es evidente que hay muchas chicas en riesgo, una chica joven es más fácil de intimidar por un profesor, porque él puede afectar sus calificaciones. No me imagino la presión que pueden tener ellas.
Mientras fue mi profesor me parecía una persona desagradable, los comentarios que hacía y las interacciones que tenía con los alumnos. Se disfrazaba de carismático como el típico profe cercano a los estudiantes, pero sí se sabía que tenía mala fama. Para mí no tuvo mayor alcance ni me vi perjudicada, pero me preocupa que siga teniendo contacto con chicas menores de edad.
16 – María José. Generación 2015
Estaba en décimo, y me faltaban puntos para pasar la materia y no ir a convocatoria, nunca había ido a una, entonces estaba súper asustada. Le pedí ayuda al profesor y él agarró un papel en donde apuntó su número de celular y me dijo; ” Tome, escríbame en la noche para ver si pasa”. Obvio no lo hice, y me di cuenta que pasé hasta el día de la entrega de notas.
17 – Hazel. Generación 2008
Antes de estos mensajes yo ya lo había bloqueado pero luego me mandó esos mensajes desde otro perfil que se abrió
18 – Karen. Generación 2015
19 – Se reserva identidad
Todo empezó desde el momento en que este señor me envió una solicitud de amistad en Facebook, la cual yo de forma poco acertada acepté. Empezó a tratar de sacarme conversación, preguntándome cosas sobre mi persona. Con el paso de los días, estos mensajes subieron de tono y se tornaron sumamente aterradores: me confesó que un día se metió a la dirección de mi colegio, revisó mi expediente, vio la dirección exacta de mi casa, historial académico (imagino que fue asi) y los números de teléfono de mis padres, el de mi casa y el mío. También, conocía las paradas de bus que frecuentaba. Yo en ese momento sentí miedo y angustia. Estaba tan asustada que en ese momento decidí seguirle la corriente por mensajes.
Definitivamente las cosas se salieron de control porque él pensó que ambos podíamos tener una relación sentimental, lo cual es ilógico puesto que, ¿a qué niña de 18 años le gustaría involucrarse con un viejo que ronda los 40 y tantos años de edad y al cual le tiene un terror excesivo? Cuando decidí acabar con esto e ignorarlo, este tipo seguía de necio, poniendome mensajes sumamente inapropiados y con alto contenido sexual, ya fuera en el transcurso del día o cuando me tocaba recibir clases con él.
Varios alumnos se dieron cuenta que yo conversaba con él, y desgraciadamente propagaron el chisme de que él y yo manteniamos una relación totalmente aparte de la relación estudiante-profesor. En otras palabras, que manteniamos una especie de relación sentimental. Eso era totalmente falso por las razones que antes expliqué. Y este señor se encargó de hacerme ver frente a todo el mundo como la culpable de la situación, insistiendo en que era yo la que lo buscaba. Y la dirección supo estas cosas y jamás me ayudó.
20 – Kimberly. Generación 2017
Él fue mi profe del 2014 al 2017. Yo no recibí tanto acoso, pero él en esos años nunca se propasó, hasta que yo salí del cole. Él me envió solicitud de amistad en Facebook y se la acepté porque yo tenía a varios profes agregados, entonces él me empezó a escribir. A mí me pareció raro pero al principio no me decía nada malo ç, era como que qué estaba estudiando, que cómo me iba con mi novio y eso.
Le dije que ya no estábamos juntos y ahí empezó a decirme cosas de que yo era muy bonita y que no se qué. Entonces yo inmediatamente corté la conversación y lo bloqueé. Eso fue como en mayo del 2018. Y hace una semana lo desbloqueé y como a los 15 minutos me llegó de nuevo la solicitud de amistad, pero no me escribió.
21 – Se reserva la identidad. Generación 2004
Él entró a trabajar en el 2004. Entró como profe de física mate, nosotros teníamos una profe buenísima y metieron a ese señor. Súper chapa para explicar y nos hacía reventados en los exámenes. Ese señor empezó con ciertas compañeras a hacerles insinuaciones en clases. Una siendo niña lo tomaba como broma. Él empezó a hacerlo despuecito del baile de graduación. Era nuestro profe guía en la 11-1.
Siempre en clase empezaba decir que para él era súper difícil llevar la paternidad porque la mujer que escogió era muy problemática, con las compañeras decía que buscaba una mamá responsable y a quien querer, a lo que entiendo más de una se fue en esas.
Después del baile me dijo que podíamos salir, que fuéramos por un café, me dijo que me podía explicar física mate. Para ese momento había un profesor en de mate en el cole, yo dije, “no, no, él me explica”. Me dijo, “ah entonces no le interesan tanto sus notas”. Le dije “yo le digo a don Alberto que lo revise”. El chavalo superó la situación y todo el asunto, pero siguió con otras compañeras. Había una compañera que siempre usaba enagua y la ponía explicar, le decía que necesitaba que fuera a la pizarra, la chavala se volvia, el agarraba palco, se sentaba al frente y la veía. Con esta muchacha empezó a salir cuando ella estaba en quinto, también salió con otras de la 11-2 y de la 11-3. Sabíamos que andaba ahí, medio medio, con otras chavalillas de décimo. Lo conocían como “el asqueroso”.
22 – Catherine. Generación 2016
Yo venía cambiándome de colegio cuando él empezó a escribirme. Todavía era una niña. Yo tenía mucho miedo y contacté a una muchacha que me dijo que le había pasado lo mismo. En los mensajes él me amenazaba, entonces yo me callaba. Entre las tres nos juntamos para denunciar, pero nos dio miedo. Luego vimos el montón de mujeres que habían sido acosadas por él.
Me escribía por mensajes, me decía que me veía muy guapa en vestido y que era hermosa. Me preguntaba que si era soltera, que si teníamos novio, etc. Yo tenía 17 años en ese momento. Decidí un día borrar la conversación, no quería tener nada más que ver con eso. Iba a empezar otra vida en otro colegio.
23 – Lineth. Generación 2015
Durante la etapa del colegio, por dicha y gracias a Dios, yo no fuí víctima de acoso por parte del profesor, pero sí pude percibir el trato de él y las miradas hacia algunas alumnas de décimo año (yo estaba en primero y segundo año del colegio).
El siempre decía amar mucho a su esposa durantes las clases, Cuándo yo salí del colégio, él me mandó la solicitud de amistad y yo se la acepté, luego comenzaron los mensajes por Facebook, diciéndome que si me había hecho modelo. Además, me preguntó que si estaba casada o feliz. Y continuaron los mensajes de “hola” pero no consiguió respuesta por parte mía
24 – Stephanie. Generación 2007
Ese señor es un descarado. Compartía mis fotos en Facebook y escribía a la par: “Mi ex alumna guapa” o algo así. Fue hace bastantes años ya. Era para que pensaran que yo estaba con él en la playa. Yo estaba trabajando normal y una amiga me llamó para preguntarme por qué el profe estaba compartiendo mis fotos. Me molestó demasiado porque él no es quien para irrespetar las personas.
25 – Yariela. Generación 2016.
En el cole, gracias a Dios nunca llegó a nada conmigo. Como en la mayoría de los casos, esperó a que saliera del cole para escribirme. El año pasado empezó a enviarme mensajes de “hola linda”, “qué bien te ves”, y cosas por el estilo. Lo que hice fue ignorarlo, nunca le conté esto a nadie. Cuando llegó Año Nuevo, él me puso “feliz año”, les comenté a mis excompañeros del cole en ese momento.
