Ottón Solís, fundador del Partido Acción Ciudadana (PAC) y actual director por Costa Rica ante el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), rechazó haber tenido cualquier vínculo con la estafa que realizó su partido al Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) durante la campaña electoral del año 2010.
El excandidato presidencial respondió así a la publicación que divulgó el medio digital elmundo.cr, en la cual se publicaban palabras suyas durante una asamblea general del PAC, en julio de 2010, en las que defendía realizar modelos de contratación con voluntarios para cobrar deuda política.
Este tipo de contratación fue el que finalmente llevó al PAC a ser condenado por los tribunales, después de que el TSE comprobara que algunos de esos contratos rojiamarillos se habían realizado a partir de servicios que se prestaron de forma voluntaria o que del todo no se realizaron.
El acta de la asamblea general del partido a la que hace alusión el diario digital recoge una intervención de Solís con la que pretendía evitar que el partido aumentara su máximo permitido para el uso de deuda política, algo que se había aprobado en una asamblea anterior y que para Solís no era necesario porque el partido igualmente no tenía la capacidad de facturar todo el dinero que podía recibir, ni había nacido con ese objetivo.
Por eso, Solís señaló que existía el método de la facturación por los servicios de colaboradores, una herramienta con la que ya habían “extraído” ¢400 millones y con la que “derivarían” otros ¢700 millones más adelante.
“¿Saben cómo logramos cobrar bastante, pero igual quedamos cortos en ¢700 millones después de las elecciones? Diciéndole a gente que ha trabajado voluntariamente que firmara contratos para que el Partido cobrara”, dijo, en referencia a los procesos anteriores a ese julio de 2010.
Al respecto, Solís aseguró a este semanario que sus afirmaciones no tenían nada que ver con la estafa y reiteró que no la conocía, pues sus indicaciones hacían referencia a los contratos, en el entendido de que los pagos cobrados eran sobre trabajos efectivamente realizados.
Además, dijo que “no había nada errado en que gente le dé contribuciones al partido (si efectivamente realizaba sus trabajos)”. “No sé cuál es el delito ni el tema ético. Mi discusión ahí era otra, era precisamente pelear por los fondos públicos y que no se cambiara la norma que puse en el PAC, desde que fundamos el Partido, en el estatuto, de que solo cobrábamos la mitad de la deuda política”.
“Esto nada tiene que ver con las acusaciones del Partido. Al partido lo acusaron porque hubo gente que hizo otra cosa, que fue hacer facturas sin contraprestación de servicios, eso fue lo que pasó ahí”, puntualizó.
Para el exdiputado, la condena por estafa y sus palabras son dos temas distintos que “se están enredando”, pues “(la estafa) eran contratos en los que no había contraprestación de servicios” y, desde su punto de vista, sus palabras se referían a la posibilidad de cobrar por trabajos verdaderamente realizados.
Piden su renuncia
El caso, a pesar de que Solís no había brindado declaraciones hasta ahora, ya provocó reacciones en la oposición. De hecho, el Partido Liberación Nacional (PLN) fue el que actuó de con mayor rapidez pidiendo la renuncia del excandidato a su silla en el BCIE, empezando por el diputado Gustavo Viales, secretario general de los verdiblancos.
“Ottón Solís, quien se creía el paladín de la ética y dijo que el PAC debía desaparecer si se demostraba la estafa en la campaña, es nuestro representante al BCIE. Ante la gravedad de lo dicho, y dado que el PAC fue condenado por estafar a Costa Rica, lo que procede es que renuncie”, escribió en su cuenta de Twitter.
Dicha solicitud fue respaldada a medias por el también liberacionista Carlos Ricardo Benavides, nuevo presidente del Congreso, quien fue un poco más cauto y aseguró en declaraciones a Radio Monumental que es necesario que Solís dé explicaciones y que renuncie a su cargo en caso de que dichas explicaciones no sean satisfactorias.
En esa línea, Solís aseguró que hasta el momento nadie le había dado el espacio para referirse a la información que circula, ni siquiera el medio que realizó la publicación inicial. “Dónde me han pedido una explicación, es increíble que se atrevan a decir esto, es una charlatanería y eso que hay herramientas para preguntar qué pasó: una reunión, herramientas que tienen los diputados, la Comisión de Control de Ingreso y Gasto Público, etcétera”, subrayó.
Además de los liberacionistas Viales y Benavides, ya también se manifestaron diputados como el socialcristiano Pablo Heriberto Abarca, también pidiendo la renuncia; así como la nueva jefa de fracción del PLN, Silvia Hernández, quien este jueves aseguró que “deben sentarse responsabilidades legales y éticas”.
“La admisión (de Solís) en el acta de la Asamblea General del PAC en el 2010 es una muestra de que el desfalco al TSE era planificado y de que él tenía claros los mecanismos que se utilizaron para estos efectos”, afirmó la liberacionista.
Extracto del acta
“No ha sido el Estatuto el que le ha impedido al PAC tener más dinero. ¿Cómo se demuestra esto? No hemos podido cobrar con el referente del cero punto ocho por ciento. La campaña pasada pudimos haber cobrado setecientos millones de colones más, con ese referente y no pudimos. ¿Saben cómo logramos cobrar bastante, pero igual quedamos cortos en setecientos millones después de las elecciones? Diciéndole a gente que ha trabajado voluntariamente que firmara contratos para que el Partido cobrara y de ahí extrajimos cuatrocientos millones. Es igual que lo que se está haciendo en la liquidación de esta campaña, vamos a derivar como setecientos millones pidiendo a voluntarios que facturen porque no hay capacidad para facturar en las bases. O sea, el cuello de botella para ganar elecciones, si es que con eso ganamos elecciones, no ha sido el Estatuto, ha sido el que no podemos facturar”, Ottón Solís (julio, 2010).
Solís: “La condena no tiene que ver con esto”
UNIVERSIDAD conversó con Ottón Solís sobre sus palabras en 2010:
Don Ottón, publicaciones de medios y diputados reseñan frases suyas en las que se hablaba de “extraer” dinero a través de contrataciones. ¿Qué quería decir con esas palabras?
— La única manera de que un partido cobre plata de la deuda política es a través de dos criterios o dos fundamentos, el porcentaje de votos o que haya facturas. (En la asamblea) estaban criticando que por la norma que yo estaba defendiendo era que se cobraba poco, ese era el ataque, entonces yo estaba diciendo que había gente que había facturado y que con eso se habían recuperado recursos. Decía que era asunto de si se facturaba o no se facturaba, y que con el voluntariado que teníamos se facturaba muy poco.
Eso era lo que estaba diciendo y no sé cuál es el problema con eso. Yo estaba diciendo una realidad y demostrándoles que si facturábamos más, y si el voluntariado no fuera tan generoso, por decirlo así, el partido podía cobrar más plata para pagarle a esa gente. Estoy diciendo que el partido cobraba poco porque por el voluntariado no se cobraba y eso es todo.
¿Usted decía que las personas que colaboraban podían facturar en lugar de regalar su trabajo?
— El partido se reclamaba que no cobramos deuda política porque solo cobrábamos la mitad y yo les estaba diciendo que no era por eso, que era porque por el voluntariado se facturaba muy poco y que por eso cobrábamos poco, pero que cuando se había facturado se había recuperado. Y yo estaba hablando de que sí, el partido tampoco es que no recuperaba plata, y se había cobrado plata para pagarle a los que estaban ahí.
El tema es otro, (en esa asamblea) yo estaba tratando de demostrar que por nuestro voluntariado es que había poco cobro de nuestra deuda política, que no era por el límite que yo había impuesto en el estatuto del partido y que cuando se habían hecho facturaciones, se habían recuperado recursos y que el partido cobraba. Eso es lo que pasa. Digamos, si usted trabaja para un partido y se dedica a organizar reuniones y si se le hace un contrato, ese contrato después el partido lo puede presentar en la liquidación de la deuda política y con la plata se le paga a usted, entonces el partido terminaba pagando más plata.
¿Y qué diferencia a eso de la condena por estafa?
— (La estafa) eran contratos en los que no había contraprestación de servicios. Eso entiendo yo que fue la acusación. Que hubo gente que algunas autoridades del partido les hicieron firmar cosas que ni sabían qué estaban firmando y después el partido fue a cobrar eso. Eso no.
Ahora, si usted trabaja por un partido, alquila el carro y le pagan por eso, firmando un contrato, pero usted decide que no le paguen y usted lo devuelve al partido, pagando el impuesto de renta, por cierto, ya eso es otra cosa, pero eso no fue lo que ocurrió en la estafa, la condena no tiene que ver con esto que estoy diciendo aquí.
Hay personas que están pidiendo su renuncia como director ante el BCIE, ¿va usted a reaccionar a esas palabras?
No sé. Esto es una indefensión. Normalmente a la gente se le escucha. Es decir, qué es este apresuramiento. Lo que nos revela es que hay politiquería y gente que me tiene el ojo a mí puesto. Dónde me han pedido a mí una explicación. Nada. Es increíble que se atrevan a decir esto, es una charlatanería, hay herramientas para preguntar qué pasó.
