Un recurso legal presentado por el catedrático de la Facultad de Derecho de la UCR, Mainor Salas Solís, -quien fue señalado por estudiantes por hostigamiento sexual e insultos- fracasó la noche de este miércoles en la Asamblea de esa Facultad.
Los docentes y estudiantes que conforman ese órgano rechazaron, por extemporánea, la impugnación presentada por el docente con la cual pretendía regresar a impartir lecciones, pues el decano de la Facultad, Alfredo Chirino, con el aval de la Vicerrectoría de Docencia, le asignó nuevas funciones docentes como revisar programas de estudio o preparar material multimedia.
El pasado 14 de octubre, el rector de la Universidad de Costa Rica (UCR), Henning Jensen, archivó una causa disciplinaria contra el catedrático Salas, la cual había sido iniciada por el decano luego de que, el 22 de mayo, UNIVERSIDAD dio a conocer testimonios de estudiantes y exestudiantes que lo señalaban por acoso sexual, frases obscenas e insultos. El rector consideró que el decano Chirino debió realizar una investigación preliminar.
Debido al archivo de esa causa, el abogado Molina y su representado solicitaron que se cambiaran las “medidas cautelares” que se le impusieron a Salas y que implicaban el cambio en sus funciones.
Este video fue preparado por la Comisión Alto al Acoso de la Asociación de Estudiantes de Derecho.
No obstante, tanto el decano como la vicerrectora de Docencia, Marlen León, sostienen que no se trata de medidas cautelares sino que es parte de la potestad del Decanato cambiarle las tareas siempre que sean parte del ejercicio docente.
El 31 de octubre, el abogado Molina presentó una apelación que Chirino elevó a la Asamblea de Facultad, la cual este miércoles concluyó que el reclamo se presentó de forma extemporánea y que, el único acto que estaba dentro del plazo para la impugnación era un documento en el que el decano le indicaba a Salas que no había presentado un material individual, informó el representante estudiantil en esa Asamblea, Luis Eduardo Zapata.
“Se sometió a votación la admisibilidad del recurso. Se consideró que ese acto no es objeto de impugnación porque no es un acto final administrativo, sino de mero trámite, porque es una comunicación que le hace el decano de que no está cumpliendo con la presentación de un material audiovisual, por eso se rechazó, aunque se expusieron otros argumentos”, explicó Zapata.
Mientras se conocía este tema en la Asamblea de Facultad, afuera un grupo de estudiantes se manifestaba en contra del hostigamiento sexual y del regreso del profesor Salas a las lecciones.
En el recurso de apelación presentado por Molina se indica que las tareas que se le asignaron a Salas son “verdaderamente titánicas o dignas de las más altas luminarias del ser humano”.
“Señor Decano, Dr. Alfredo Chirino Sánchez, sin ánimo de caer en la ironía o el sarcasmo injustificado, mi representado y yo consideramos que solo una mente privilegiada como la de Aristóteles, Leibniz, la de Da Vinci, Bertrand Russell o quizás la de Hans Kelsen u otro genio del Derecho estaría en condiciones de ejecutar, ya no todos, pero quizás algunas de las tareas (“algo así como las 12 faenas de Hércules”) que usted ha consignado en los oficios indicados y le pide al Prof. Salas Solís ejecutar “en el medio tiempo docente, que actualmente tiene”, dice el recurso interpuesto.
El catedrático Salas ejerce medio tiempo como investigador universitario y el otro medio tiempo como docente.
El profesor fue sancionado en el 2015 con ocho días de suspensión por hostigamiento sexual a una estudiante.
Su abogado, Boris Molina, sostiene que las tareas que le asignaron a Salas son de carácter administrativo y que él tiene derecho de impartir sus lecciones.
