Si la UCR gana esta serie es campeón, pero si pierde jugará gran final, nuevamente, ante los abogados.
Luego de una larga temporada en la Liga de ascenso del baloncesto masculino, el equipo de la Universidad de Costa Rica tiene cerca la posibilidad de su segundo título en tres años, tras ganarlo en 2014 ante el ya desaparecido equipo de Puntarenas en cuatro juegos, y posteriormente declinar el ingreso a la Liga de Baloncesto Superior. El equipo universitario volvió a la final ante la Universidad Latina la temporada anterior, sin embargo sucumbieron en solo dos partidos.
En este 2016, la temporada ha sido de ensueño para los celestes: ganaron los 16 partidos de la fase de clasificación y esto les permitió cerrar en el primer lugar con el pleno de 32 puntos, además de clasificar para la gran final ante el ganador de los playoff, o bien coronarse de forma automática si son ellos mismos los ganadores.
Y en esta fase de muertes súbitas también se muestra un dominio solvente, aunque inició su primera serie ante la Universidad Católica con una sorpresiva derrota en casa de 72-73. Pero luego, el equipo celeste volvió por sus fueros y volcó la serie ante los moravianos con dos palizas: 67-88 de visita y 92-39 como local. Además, resolvió en dos juegos las semifinales ante Alajuela, con un 47-55 en Alajuela y un 64-44 en las Instalaciones Deportivas en Sabanilla.
Su rival en la final, el Colegio de Abogados, es un equipo con jugadores cuya jornada cotidiana se mueve principalmente entre bufetes, salas de juicio, departamentos legales, tribunales o juzgados. Sin embargo, nada de eso les ha impedido pelear el título de la categoría con todas las de la ley.
Los especialistas en Derecho finalizaron la fase de clasificación en el segundo lugar con apenas cuatro caídas, y un total de 28 puntos, y en su carrera al título sacaron primero a la Universidad Nacional en dos juegos, y luego a Curridabat en tres.
MANTENER UNA BASE
La clave del éxito del equipo universitario para mantenerse siempre peleando las primeras posiciones radica en conservar una base que varía poco entre un torneo y otro.
Además del entrenador Alexis Monge, se conservan varios jugadores como Mauricio Chacón, Pablo Echeverría, Juan Diego Vargas, Juan Ignacio Cordero, Ramón Solano, Jorge Quesada, Marvin Avilés y Luis Hernández. Todos ellos ya tienen experiencia en este tipo de instancias, pues son sobrevivientes del equipo que campeonizó en Puntarenas en mayo del 2014 y del que perdió el título ante la Universidad Latina, además de haber llegado a semifinales de Liga Universitaria en 2014, ser tercero de los ODUCC Panamá 2015, ganar los JUNCOS UNED 2015 e ir invicto en esta.
Además, los nuevos refuerzos de este año (Jay Allen, Francisco Sequeira, Pablo Jiménez, Edgar Avilés, Johel Rosales y David Vargas) se han ido acoplando poco a poco a los planteamientos de Monge, incluso, han aportado puntos clave en distintos partidos, aunque el mayor peso ofensivo del equipo lo poseen Vargas, Chacón y Solano.
UNIVERSIDAD CERCA DE ASCENSO
La serie final de los playoff inició la noche de este sábado en las Instalaciones Deportivas con victoria celeste 82-51 en un juego donde los locales dominaron de principio a fin gracias al trabajo de Solano y Quesada, quienes aportaron 34 unidades entre ambos.
Para el entrenador del colegio profesional, Danilo Valverde, la actitud y los errores fue la causa de la pérdida en el primer juego. “Para jugar con este equipo (la UCR) usted tiene que jugar un juego casi perfecto y hoy nos hicieron pagar nuestros errores y encima el excesivo talento que tiene el equipo”, explicó.
Por otro lado, su contraparte del equipo universitario, Alexis Monge, resaltó la importancia de la experiencia de sus jugadores y el acople de sus jugadores nuevos. “Es muy importante porque eso le da estabilidad al equipo, son jugadores que ya pasaron por dos finales y se manejan bastante bien, son jugadores con mucha experiencia. Los nuevos tienen bastante nivel y nos han reforzado bastante bien”.
El segundo partido está programado para el sábado 17 de setiembre a las 8 p.m. en el gimnasio del Colegio de Abogados, ubicado en Zapote, y si fuese necesario un tercer encuentro, este se realizaría el viernes 23 de setiembre a las 7:30 p.m., otra vez en las Instalaciones Deportivas.
En días recientes trascendió que esta sería la última temporada de la Liga de ascenso, pues la Federación Costarricense de Baloncesto busca fusionarla con la Liga de Baloncesto Superior y ampliar esta última categoría entre ocho y diez equipos para la temporada 2017, pero con patrocinios para uniformes, refuerzos extranjeros y pagos de arbitrajes, así como con una categorización de jugadores que evite que las mejores fichas queden en uno o dos equipos.
Este certamen está previsto para arrancar entre febrero y marzo, según lo había externado el presidente de la Federación, Luis Blanco, en una entrevista con UNIVERSIDAD pocos días antes de asumir el cargo, en febrero del presente año.
Además, propone sustituir la Liga de Ascenso ya sea con un torneo de desarrollo, reservas o sub 23 salidos de la Liga Menor. No obstante, todas estas propuestas se irán oficializando en las reuniones que sostendrá la Federación con los equipos una vez acabe la temporada.
Tras consultar al director de la Unidad de Programas Deportivos Recreativos y Artísticos, Gerardo Corrales, acerca de los planes del equipo universitario, se mostró seguro del ascenso, pero descartó la desaparición de la Liga de plata.
“Definitivamente la Liga de Ascenso no va a desaparecer. Puede ser que hagamos un planteamiento donde se fusionen los mejores equipos de la Segunda con la Primera, pero hay que discutirla una vez con la final asegurada”.
Al consultarle sobre las condiciones que cambiaron para que en esta ocasión acepten el ascenso a diferencia de hace dos años, Corrales lo atribuyó a la nueva Junta Directiva y a las políticas de categorización, topes salariales y minutos sub 21 que pretenden hacer más equilibrado el baloncesto de la Liga Superior, aunque mantendrá la política de solo aceptar estudiantes universitarios en el equipo.
