Apenas un par de semanas después de concluir la edición 2019-2020 de la Liga Nacional de Fútbol Aficionado (Linafa) con Cariari como su campeón, gran parte de los clubes de la categoría de bronce del fútbol varonil anunció su renuencia a participar en la edición 2020-2021 de esta liga por la molestia que hay entre sus dirigentes con los presidentes de Linafa, Juan Carlos Román, y de la Primera División Aficionada (PDA), Luis Jiménez.
Menos de la mitad de los 80 clubes que concursaron en la campaña 2019-2020 se inscribieron para 2020-2021, y el resto pretende en términos generales una intervención de la Federación Costarricense de Fútbol para revisar y reformar los estatutos de la liga, así como la salida de los dirigentes, debido a disconformidades con su gestión. Con este fin se reunieron para conformar la Comisión de Representantes de Primera División Aficionada de Fútbol (Coprifut), que en la actualidad agrupa a clubes de Guanacaste, Puntarenas, San José y Cartago.
Umaña: “No tenemos voz ni voto en la Asamblea”
El vocero de COPRIFUT y presidente del club desamparadeño ACF Gallada, Jeremy Umaña, explicó en una serie de entrevistas a diferentes medios y en el perfil de Facebook de su club que algunas de las decisiones que los tienen enfrentados con la liga son los montos altos que les cobran sobre inscripciones, arbitrajes e implementos para cumplir con los protocolos sanitarios, la nula representatividad en la Asamblea y en el Consejo Director de Linafa, la no entrega de informes de cuentas sobre lo que se hace con los montos recaudados, ni con los premios de los mundiales Brasil 2014 y Rusia 2018, pese a que la mitad del premio que le correspondía a la categoría debía irse a la Primera División Aficionada.
“Nosotros estamos solicitando una reforma de estatutos, no es posible que nosotros que somos la liga más grande, 81 equipos solo de Primera División de frontera a frontera, sume las ligas menores, el señor (Román) dijo que eran 1000 en total, pagamos 90 mil colones por tener en cada una de las ligas (entre tercera y décima división aficionada) y 500.000 en Primera División (…) si queremos hacer alguna observación no tenemos voz ni voto en la Asamblea, (…). ¿Por qué nosotros no podemos someter el puesto de Juan Carlos Román a votación popular si en las dos primeras ligas principales pueden hacerlo?” se preguntó el dirigente desamparadeño.
Umaña agregó que para llenar el campo de equipos, se metieron a clubes que no quedaron en los dos primeros lugares de las regiones, o a otros clubes que habían descendido de la PDA a la Tercera División, aspecto que en su criterio violenta los propios estatutos de Linafa.
También mostró su molestia porque se solicitara el dinero sin tener previamente los protocolos aprobados para iniciar la temporada 2020-2021, y por ende, sin tener garantía de que pueda realizarse el torneo. Eso sin mencionar que las ligas menores fueron canceladas por el resto del año y aún se desconoce si en 2021 se podrán retomar.
Por último, criticó que se les impusiera como requisito para jugar las fases finales la adquisición de equipos de protección personal y seguridad a la empresa Cedijel, donde están Jiménez y Román.
Román: “Los representantes tenían voz”
Sin embargo, Román salió al paso de las acusaciones. En diferentes entrevistas a varios medios, incluida la página oficial, explicó que la estructura está diseñada para darle el voto solo a las regiones, pero los equipos sí tienen posibilidad de plantear sus sugerencias a través de sus representantes regionales.
“Desde hace años implementamos una comisión para que cada grupo tuviera un representante y pudiéramos ver los problemas o sugerencias de ellos”.
Agregó que muchos de los acuerdos eran tomados con los representantes de los equipos, como el de los seis que concursaron en la fase final del torneo 2019-2020. “Voz siempre han tenido porque de hecho yo me he reunido con ellos (…) yo nunca le he cerrado la puerta a ningún representante, me caiga bien, mal o nos llevemos a medias, siempre ha estado mi puerta abierta para oirlos a ellos. Ahora, ellos todo tienen que canalizarlo a través de la Primera División”.
Jiménez respaldó la postura de Román y explicó que los premios de mundiales no se les iban a dar en efectivo a ningún dirigente por acuerdo con los representantes de regiones, sino que en su lugar se les iba a repartir de forma que se invierta en el fútbol.
“Se hizo un acuerdo de dar dos puntos: uno era que los equipos tenían su libertad de escoger si se les daba la inscripción de todo el año y se les pagaba cuatro dietas arbitrales…La opción dos decía que no pagaban inscripción el primer año y se les daba uniforme y balones, el segundo año pagaban 300 mil colones de inscripción más un uniforme y balón y el tercer año es una parte de inscripción y uniforme y balones”.
Jiménez cuestionó las quejas sobre la onerosidad de las inscripciones, y señaló que ese monto y el de las dietas arbitrales no son nada a la par de los gastos en las dos divisiones superiores, donde se debe pagar planilla, cargas sociales, y un monto mayor en inscripciones y en arbitrajes.
Aunque ambos dirigentes de Linafa admitieron tener parte en la empresa Cedijel, negaron cualquier relación con los gastos logísticos de la fase final de Linafa y que se obligara a los clubes a adquirir productos de esa compañía. Además, agregaron que los protocolos ya estaban realizados, pese a no tener aún aprobación del Ministerio de Salud ni el de Deportes, pero que antes de presentarlos a los ministerios tenían que esperar al cierre de las inscripciones a inicios de julio para analizar detalles logísticos como estadios que cumplan con los requisitos sanitarios, número de equipos y con base en eso, afinar el formato.
Román y Jiménez finalizaron poniendo sus cargos a disposición de la Asamblea y del Comité Ejecutivo de Linafa.
Conflicto continúa.
Sin embargo, Umaña considera que hubo varias falsedades y omisiones, así como contradicciones entre ambos dirigentes de Linafa en puntos como la cantidad de equipos inscritos, el cierre de inscripciones o los montos.
Otro de los dirigentes de clubes, Geovanny Torres, quien preside al Deportivo Upala, compartió un pantallazo de un chat en el cual le reclamó a Román el negarle la entrada a una reunión de representantes sobre los premios del mundial, y adujo que sólo pudo entrar por intervención de su colega del Desamparados FC, Gustavo Picado.
Una vez enviado el caso a la Federación Costarricense de Fútbol para su investigación, la secretaria de la entidad, Margarita Echeverría, le respondió a Umaña el 22 de julio en una misiva habilitada por él a UNIVERSIDAD que el caso sería remitido a Linafa para hacerlos pronunciarse antes de la próxima sesión del Comité Ejecutivo de la Federación y tener más elementos y resolver de mejor manera el caso. Ese mismo día, Linafa envió un comunicado donde se acordó evitar cualquier referencia adicional sobre estos temas con el fin de no entorpecer las investigaciones de la Federación.
Fotos: Luis Carlos Jiménez, Juan Carlos Román Hernández, JeRe Umaña y Ascenso Total