Costa Rica se dejó dos medallas de bronce en su primer día de participación en el Campeonato Panamericano de Cross Country, pero en medio de estos triunfos surgieron una serie de molestias con la Federación Costarricense de Ciclismo.
La primera medalla de bronce vino por Enrique Artavia en la categoría máster y la siguiente vino en los relevos por equipos, donde competían Carlos Herrera, Milagro Mena, Sebastián Brenes, Isabella Gómez, Steven Vargas y Marisol García; sin embargo en este caso el bronce estaba asegurado y era el mínimo logro posible ya que solo había tres selecciones, e incluso la nacional estaba en riesgo de no participar si no se completaba la inscripción de García.
Pese a su bronce, Artavia no ocultó su molestia contra la Federación y la empresa patrocinadora Go Rigo Go, y tomó la decisión de prohibirles utilizar las imágenes de su carrera como medida de protesta, ya que adujo que él fue uno de los que tuvo que pagarse hasta su uniforme de selección para poder asistir, contrario a lo que sucede con otros ciclistas que también asistieron.
“Acá hay un papá (Carlos García Dobles, padre de Marisol e Isabel García, otras seleccionadas) que me dijo ‘no es la misma ilusión para mis hijas que yo pagara por sus uniformes que si se los hubieran dado'”….
A su vez el representante de Go Rigo Go, Camilo Gutiérrez, indicó que con su patrocinio la Federación pudo haber dado uniformes a toda la delegación de deportistas, pero que pasaron una lista de a cuáles ciclistas se les cobraba y a cuáles se les daba.
Estas denuncias le valieron una serie de críticas a la entidad federativa en redes sociales y a través del sitio especializado CRCiclismo, donde incluso el mismísimo Andrey Amador no ocultó su escepticismo y molestia ante el hecho de que haya seleccionados a los que se les cobren tiquetes y uniformes. La Federación hasta el momento no se ha pronunciado ante los cuestionamientos.
