La Grande Plage de Biarritz, en Francia, fue testigo durante nueve días del Mundial de Surf organizado por la Asociación Internacional de Surf (ISA, por su sigla en inglés).
En este acontecimiento, la selección de Costa Rica estuvo por debajo de sus propias expectativas y finalizó apenas en la novena casilla al recopilar un total de 2.113 puntos sobre un máximo de 5.120 posibles. El campeón fue Francia con un total de 4.275 puntos.
Los puntajes de las selecciones se obtienen con base en la sumatoria de los desempeños de los seis surfistas (cuatro hombres y dos mujeres) de cada selección, de acuerdo con la posición final en la que hayan quedado.
Los seis surfistas que estuvieron bajo las órdenes de Jim Hogan mostraron un rendimiento relativamente discreto en las olas francesas y tuvieron que lidiar con falta de oleaje y continuas posposiciones que acabaron por pasarles la factura.
La participación más destacada fue la de Leliani McGonagle en el Open femenino, al finalizar en la tercera posición, por detrás de las francesas Pauline Ado y Johanne Defay.
Sin embargo, la golfiteña se mostró insatisfecha con su ubicación final, ya que soñaba con superar su subcampeonato de hace dos años en Nicaragua.
“La verdad es que es menos de lo que quería, buscaba la medalla de oro para el equipo; no se pudo esta vez, pero sí en una próxima”, explicó a la Federación de Surf de Costa Rica. Eso sí, McGonagle admitió el alto nivel de las contendientes, pues las dos galas y la sudafricana Bianca Buitendag, la otra finalista, son competidoras élite del Tour Mundial.
La otra surfista, Emily Gussoni, apenas se quedó en la tercera ronda de seis al acabar en el último lugar de su heat frente a la peruana Daniella Rosas, la inglesa Ellie Turner y la ecuatoriana Dominic Barona, y de este modo la joven originaria de Jacó quedó en la plaza 25.
No llegaron
Mientras tanto, en la rama masculina, Jason Torres fue el que más temprano se despidió del torneo, ya que naufragó apenas en la segunda ronda sobre siete posibles, tras ser superado por el japonés Rinta Oooto, el peruano Juninho Murcia y el tahitiano O’Neill Massin.
El debutante Leonardo Calvo y el experimentado Jair Pérez aguantaron hasta la tercera ronda. En el caso de Calvo, quedó tercero de su heat por delante del senegalés Thierno Sambe y detrás del español Imanol Yeregui y el neocelandés Taylor Hutchinson, mientras que Pérez finalizó por debajo del uruguayo Luis María Iturria, el australiano Blake Levett y de Oooto.
Finalmente, Anthony Fillingim fue el hombre costarricense que más lejos llegó, pero cayó tan solo en la cuarta ronda, al ser el último de su heat ante el tahitiano Ariihoe Tefaafana, el marroquí Yassin Ramdani y el portugués Guilherme Fonseca.
Estos resultados dejaron a Fillingim en la casilla 25 en general con 360 puntos, a Calvo en la 33 con tan solo 320, a Pérez en la 49 con apenas 240 y a Torres en el lugar 97 con 103 puntos, empatado, entre otros, con el que llegaba como campeón mundial, el argentino Leandro Usuna.
Fillingim reveló que la clave para avanzar tan lejos estuvo en aprovechar las olas correctas ante su escasez, ya que el mar de Biarritz se caracterizó por ser relativamente plano durante las competencias.
“Las olas están muy pequeñas, por eso esperar la mejor y hacer el uso correcto de la prioridad es tan importante. Sin embargo, tienen su línea y si lográs correr la correcta vas a tener los puntos que buscás”, explicó a la Federación.
Su entrenador Hogan coincidió en este aspecto y se mostró impresionado por la unión de equipo que hay entre los surfistas nacionales, pese a haber asumido a finales de marzo y a haber dejado fuera a figuras como el campeón mundial de 2015, Noe Mar McGonagle, los hermanos Luis y Lisbeth Vindas, Maykol Torres y Carlos Muñoz.
“Me encanta que el equipo sea tan unido. La Selección Nacional de Costa Rica, lejos de ser un increíble equipo, es una familia. Eso es una herramienta para mí que he estado utilizando y los resultados han sido positivos”, comentó.
A pesar de ser una de las participaciones más discretas, en términos generales no todo fue negativo, ya que de acuerdo con la Federación de Surf de Costa Rica, la selección lleva 11 mundiales seguidos en el top 10, donde incluso se alcanzó el título en Nicaragua.
El dominio absoluto de los franceses en su mundial fue interrumpido por el mexicano Johnny Corzo, quien se coronó como nuevo campeón mundial en Open Masculino.
Problemas con olas
Pese al ambiente festivo de un evento deportivo de este calibre, el principal problema fue la escasez de olas que llevó a los organizadores a correr en varias ocasiones los distintos heats y reprogramarlos horas después, hasta que se dieran olas lo suficientemente complejas como para procurar puntajes lo más cercanos posibles al 10 por ola, y 20 por serie.
Esto obedece a que se pueden tomar tantas olas como sean necesarias, pero el jurado de cinco jueces solo considerará las dos mejores de cada surfista, en los 20 minutos que posee para su participación. Y la calificación de cada ola se saca con base en el promedio de los tres valores intermedios.
Otra de las medidas que debió tomar la organización fue acortar cada heat de 20 a 15 minutos, con tal de poder salir adelante con la programación.
