Dúo masculino Fallas-Lezcano ganó invicto Centroamericano de voleibol de playa, mientras que la pareja femenina Williams-Villegas se quedó por fuera.
Hace unos años el voleibol de playa costarricense hizo historia cuando Natalia Alfaro y Karen Cope compitieron en los Juegos Olímpicos Río de Janeiro 2016. Dos años después, un par de muchachos menores de 19 años de edad, Alexandre Lezcano y Criforth Fallas, se convirtieron en los primeros hombres costarricenses en representar a la disciplina en unos Juegos Olímpicos, aunque en este caso serán los Juegos de la Juventud Buenos Aires 2018, por realizarse en el mes de octubre.
Lezcano y Fallas, dos estudiantes colegiales oriundos de lugares ubicados a 360 kilómetros de distancia entre sí (Puerto Jiménez de Osa y Ciudad Colón de Mora), hicieron lo que debían en el Centroamericano Sub 19 de Voleibol, realizado el pasado 10 y 11 de marzo en Puntarenas, y se dejaron el único boleto disponible para los Juegos.
Para ello, debían vencer a todos sus oponentes, sabedores de que bastaba una única derrota para que el objetivo se fuera por el drenaje. Así lo hicieron: ganaron sus seis partidos ante el resto de oponentes de América Central y únicamente cedieron un set en todo el campeonato, ante el dúo de Jefferson y Cristopher Cascante, de Nicaragua, en la penúltima fecha.
Este partido revistió todas las características de una final adelantada, ya que los “pinoleros” también ganaron el resto de sus juegos, pero su esfuerzo no les alcanzó y tuvieron que contentarse con la medalla de plata.
Desde el inicio de las vacaciones colegiales y hasta esta competición, los dos estuvieron concentrados junto con uno de sus entrenadores, Adilson Milanés; varios jugadores más, que al final no fueron seleccionados, y las muchachas candidatas a la selección femenina.
Al final, el dúo de elegidas fue Ángel Williams y Camila Villegas, sin embargo a ellas no se les dieron los resultados y quedaron eliminadas luego de finalizar en la tercera casilla, por debajo de Guatemala y Nicaragua. En esta rama femenina las guatemaltecas fueron las ganadoras y por ende las clasificadas.
De acuerdo con el vocero de la Federación Costarricense de Voleibol, Álvaro Castro, a raíz de este resultado se buscará trasladar a Fallas y Lezcano al Liceo de Atenas, donde trabaja Luis Sandoval, el otro de sus entrenadores, para que allí se les pueda diseñar a los jóvenes un horario especial que les permita estudiar y entrenar en conjunto de forma frecuente para las justas argentinas.
“Obviamente, lo primero era clasificar a las Olimpiadas, y ahora que ya clasificamos no podemos conformarnos. La idea no es solo ir a jugar y ya; vamos por una medalla, y ahora quieren que vayamos al mismo colegio, el de Atenas, para que tengamos un horario especial para poder estudiar y entrenar. Ahora que se terminó la eliminatoria tomamos una semana de descanso; luego, a entrenar otra vez, y es lo mejor”, comentó Fallas.
“Aparte de mí, a mi compañero también le gusta, porque es algo histórico para Costa Rica, es la primera vez que voleibol de playa clasifica, estamos demasiado motivados para tomar el riesgo de estudiar y entrenar, no estar en casa con nuestros amigos, padres, etc. Estamos preparados para hacerlo”, añadió.
Lezcano dedicó su éxito a varias comunidades que facilitaron la preparación para este torneo. “Uno va a todo lugar y lo reciben muy bien, la alimentación, dormida, todas esas cosas, y uno siempre quiere darles la alegría así como le dan a uno, entonces eso es para ellos, el profe Luis y el cubano (Milanés), quienes son parte de esto”, dijo.
Milanés se mostró contento y dedicó el triunfo a sus familiares, padres y profesores de los muchachos. “Mi familia en Cuba debe estar contenta con eso, porque es un sacrificio dejar a un niño chiquito para estar acá con ustedes, (…) lo más importante son los profesores de base que los formaron, con el sacrificio y el sudor de los padres de familia, a los directores de las escuelas donde estudian estos chiquitos, por todas las facilidades que nos dieron, saludos a la gente de Atenas, Tambor, Jiménez, Tamarindo, son muchas personas”, explicó luego de su triunfo en el último juego.
Por su parte, Fallas contó las peripecias que tuvieron que pasar durante el mes previo al torneo. “Durante un mes estuvimos en la casa de Luis Guerrero (entrenador), por lo menos 15 personas en la casa de él para poder entrenar. Nosotros nos adaptamos en todas las vacaciones de colegio a estar allí, porque al kilómetro queda la casa de Luis Sandoval, y teníamos que ir corriendo a las 6 a.m., 10 a.m. y 4 p.m. para obtener los materiales y empezar a entrenar”.
Agregó que la escogencia suya y de Lezcano se dio luego de los distintos procesos de selección, con base en el desempeño en las pruebas finales, y descartó problemas de acople a pesar de la distancia, pues asegura que ya se conocían de previo.
