Deportes BN Arena acogió IHF Intercontinental Trophy Junior y Juvenil  de Balonmano

Cuando Hatillo decidió transformarse en la sede de balonmano de alto nivel

Torneo daba los últimos cupos a Mundial Junior Alemania-Grecia y Juvenil Croacia 2023, Costa Rica Junior lo usó como fogueo pero necesita fondos para ir.

El gimnasio BN Arena, ubicado en la Ciudad Deportiva Heiner Ugalde del distrito capitalino de Hatillo, se transformó en todo un escenario donde los procesos mundialistas rumbo a los Mundiales Junior (sub 21) Alemania-Grecia y Juvenil (sub 18) Croacia 2023 llegaron a su final, mediante el IHF Intercontinental Trophy (Trofeo Intercontinental de la Federación Internacional de Balonmano) de ambas categorías.

Normalmente, en estos torneos concursan países sin tradición mundialista en balonmano, pero en esta ocasión cada categoría ofertaba el cupo número 32 y último para cerrar las listas mundialistas.

Costa Rica como campeón centroamericano, Cuba como triunfador del Caribe y Norteamérica,  Guinea como campeón del Trofeo Continental de África, Gran Bretaña como monarca del Trofeo Continental de Europa y Australia como vencedor en Oceanía fueron los concursantes en Junior; mientras que en Juvenil los respectivos cupos continentales fueron para Nicaragua, Guadalupe, Nigeria, Georgia y Tahití.

“Es un mundial caro, pero tenemos que seguir apoyando, ellos (jugadores) demuestran que se merecen ir al Mundial, y tenemos que ayudarles a estar”, Silke Méndez.

Para costarricenses y cubanos, el torneo sirvió como preparación mundialista, ya que ambas escuadras ganaron sus cupos previamente en procesos eliminatorios, y, mientras el equipo nacional jugará en territorio germano contra Portugal, Brasil y Kuwait, los caribeños irán a Grecia contra la selección local, Egipto y Arabia Saudí. Así, el concurso por un cupo para ir a territorio heleno y jugar contra Suecia, Eslovenia y Bahrein quedó entre británicos, guineanos y australianos, pero México y Paraguay también estaban a la expectativa por si acaso Cuba o la escuadra nacional respectivamente ganaban el certamen.

Por otro lado, los guadalupenses no eran elegibles para un mundial por ser miembros regionales de la Federación Internacional de Balonmano (aunque ganaron el torneo norteamericano y caribeño juvenil, los cupos mundialistas se le asignaron a México y Estados Unidos), por lo que solo concursaron por el trofeo intercontinental. Por ende, el cupo para Croacia a jugar contra Noruega, Montenegro y Macedonia del Norte fue un asunto de nigerianos, georgianos, tahitianos y nicaragüenses.

Finalmente, las selecciones de Georgia en juvenil y México en junior se ganaron los tiquetes a sus respectivos mundiales. Los europeos solo cayeron contra el equipo francoantillano, quien se llevó el trofeo, pero antes cumplieron contra centroamericanos y oceánicos, y en un duelo infartante dejaron con las manos vacías a Nigeria 28-27. Mientras que los aztecas, que no estaban concursando, se beneficiaron del triple empate a 6 puntos entre Cuba, Guinea y Gran Bretaña donde el gol diferencia particular le dio el título a los caribeños, y como ellos ya tenían cupo, Estados Unidos, como subcampeón regional también lo tiene, y ni Guadalupe ni Martinica son elegibles, este pasó a manos de los aztecas de acuerdo con los reglamentos.

Las voces del triunfo

Sabiendo el estatus de su equipo, la entrenadora del equipo juvenil guadalupense, Sladjana Topic, expresó que venían con el objetivo de ser campeones continentales e intercontinentales. “Nos llega al corazón haber ganado el trofeo, significa mucho para nuestra isla, nuestros padres, familias, todos los que nos acompañan, entonces, nos sabe muchísimo, y yo soy la entrenadora más feliz del mundo”. La también seleccionada bosnia resaltó la historicidad de este logro en los equipos varoniles de la isla, ganando el trofeo continental de Norteamérica y Caribe y el intercontinental por vez primera, así como el crecimiento del balonmano caribeño, y dejó patente su deseo de seguir con esta generación en el proceso junior de 2025.

El jugador georgiano Giorgi Areshidze atribuyó el éxito de su equipo a la experiencia y rehuyó cualquier mérito individual tras ser nominado como la figura del juego decisivo contra Nigeria. “Tenemos jugadores muy experimentados en el equipo, no sé por qué me nombraron jugador del juego, pero sé que cada jugador de nuestro equipo es muy buen jugador, y estamos en busca de ser campeones mundiales un día”.

Por su parte, su colega cubano Maiko Vázquez se apegó a un discurso de optimismo, autocrítica y preparación para llegar de la mejor forma a Grecia. “No podemos ser conformistas, hay una meta más grande que es el mundial, tenemos que corregir los problemas que demostramos aquí y prepararnos más fuerte que para este torneo, pero todo va a estar bien”, concluyó la figura del último juego contra Costa Rica.

Preparación en medio de incertidumbre

El equipo costarricense de balonmano enfrentó este torneo en medio de una incertidumbre muy grande por el mismo motivo que en el pasado truncó oportunidades únicas de roce internacional del más alto nivel en muchos otros deportes: la falta de dinero.

Pero, además, sus jugadores tienen que conciliar lo laboral y/o lo académico con lo deportivo, y cuando esto no se puede, que es la mayor parte de las veces, las opciones son guardar o deshacerse de sus implementos deportivos más preciados y retirarse, o empeñar su futuro laboral y/o académico, ya que la oportunidad de jugar en ligas profesionales o con becas de universidades del extranjero no les llega, en Costa Rica simplemente no existe, difícilmente encuentran nuevos empleos, y más con flexibilidad de horario. Y para quienes proceden de zonas alejadas del Valle Central, el desafío es aún mayor.

De acuerdo con la presidenta federativa Silke Méndez, desde que se abrió una campaña para recolectar fondos hasta la noche inaugural, no se ha recolectado ni la vigésima parte de lo que se necesita para viajar en junio. “Mire, el tico se ha hecho presente, pero falta muchísimo, no tenemos todavía ni un 5% de lo que se necesita, es un mundial caro, ir a Alemania, los pasajes y la estadía son caras, pero tenemos que seguir apoyando, ellos (jugadores) demuestran que se merecen ir al Mundial, y tenemos que ayudarles a estar”.

Al día siguiente a la inauguración, la Federación puso una venta de jarras, camisetas y hasta una alcancía con el fin de recaudar fondos o donaciones, además de sus cuentas bancarias y Sinpe móvil con los que ya contaba. Posteriormente, off the record (extraoficialmente) después de la premiación, admitió que era una proyección optimista y solo después del cierre de edición podría brindar el corte post torneo. Pese a ello, la jerarca no claudica en la lucha por conseguir de aquí hasta mayo, fecha límite, patrocinios que pueden variar desde el dinero en sí mismo hasta el patrocinio de uno o varios jugadores, e incluso el financiamiento de los tiquetes.

Méndez agregó que al acoger este torneo el equipo obtiene una oportunidad de preparación mundialista que no hubiera podido conseguir de otra forma. “De no ser por un torneo como este y de no atreverse el país a hacerlo, ellos no hubieran podido foguearse como lo están haciendo, imagínese cuándo íbamos a tener la oportunidad de enfrentar a equipos como los que tenemos, Australia, a Guinea, Cuba o Gran Bretaña”.

Por su parte, el entrenador Ahnner Parra también se mostró a gusto con el torneo: “Realmente

es un torneo de muy buen nivel que nos va a ayudar muchísimo a foguear al equipo a un mundial que se sabe que es un nivel muy alto con equipos que ya tienen costumbre de estar”.

Para Parra, los rivales del torneo muestran características similares a las que verían contra lusos y kuwaitíes, mientras que apelan a la memoria del proceso eliminatorio de octubre para estudiar a Brasil y aprender de aquel episodio en procura de reducir la brecha. “Gran Bretaña es el representante de Europa, ellos tienen un juego parecido al de Portugal, que es de la misma zona, Guinea y Cuba tienen similitud con Kuwait, y con Brasil ya habíamos jugado hace poco en el clasificatorio así que ya tenemos idea de lo que nos van a presentar en el Mundial”.

Uno de ellos, Saúl Vargas, coincidió con Parra en la importancia del torneo: “El torneo ayuda muchísimo, el roce contra equipos como Cuba, Gran Bretaña o Guinea es un roce muy fuerte, a una menor escala, pero parecido al que vamos a tener en el mundial, y eso nos ayuda a llegar  más seguros de lo que vamos a ir a hacer allá”.

Para él, el torneo les da una idea sobre lo que pueden esperar del seleccionado de Oriente Medio, y reconoce la superioridad de lusos y sudamericanos: “El nivel que se muestra acá es  muy parecido al de Kuwait; Brasil y Portugal es un poco más avanzado, pero igual vamos a ir con todo”.

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