De una manera diferente y respetuosa de la situación sanitaria por la COVID-19, los nadadores olímpicos Beatriz Padrón y Arnoldo Herrera tuvieron su recibimiento en su natal Belén luego de su paso por los Juegos Olímpicos Tokio 2020.
A bordo de un descapotable blanco, y bajo un sol calcinante, los nadadores, junto con su entrenador de equipo y de delegación, Pablo Camacho; y sosteniendo una bandera roja y blanca con los colores del cantón; recorrieron el sétimo cantón de la provincia de Heredia con bocinazos y saludos hacia las casas, los vehículos y quienes en ese momento transitaran por los 12,15 kilómetros cuadrados del cantón.
Aunado a esto, una caravana de cuatro vehículos adicionales escoltó a ambos nadadores, y la policía municipal colaboró para el desfile de ambos.
Durante la transmisión de la actividad por las redes sociales de la Municipalidad, abundaron los comentarios de felicitaciones y orgullo para ambos deportistas, aunque tampoco faltaron las voces de incredulidad y las críticas al recibimiento argumentando que no ganaron nada importante.
En territorio japonés, si bien es cierto sus lugares relativos son bajos a la par de otros nadadores en el ámbito mundial, Padrón consiguió bajar su tiempo de inscripción en las justas en un segundo y medio, además de quedar ubicada como la mejor centroamericana en los 200 metros libre; mientras que Herrera estuvo a 38 centésimas de igualar su tiempo de inscripción a los Juegos, además de establecer su mejor tiempo en 2021 en la misma distancia en modalidad pecho.
