Cultura

Red de Emergencia Cultural presenta propuesta de ley para apoyar al sector

Subsectores de cultura se organizan por primera vez en una red y presentan un documento al Presidente de la República y a la Asamblea Legislativa que propone soluciones para sobrellevar la emergencia por la pandemia.

Este jueves 20 de agosto se celebra en nuestro país el Día del Artista Nacional, efeméride que conmemora y reconoce la labor desempeñada por los artistas mediantes sus expresiones culturales y que contribuye con la construcción de un tejido social y económico vital para la sociedad costarricense.

Precisamente este día fue escogido por la Red de Emergencia Cultural (REC) para presentar al Presidente de la República, Carlos Alvarado, y a la Asamblea Legislativa la propuesta de proyecto de Ley de Apoyo al Sector Cultural Nacional ante la Emergencia Nacional provocada por la Pandemia del Sars-COVID-19.

El documento será entregado al mandatario con el fin de que este a su vez convoque a su discusión en las sesiones extraordinarias de la Asamblea Legislativa que se llevarán a cabo en agosto.

Considerado como un hito gremial histórico, la REC se conformó el 8 de junio de 2020, a raíz de la aguda crisis que atraviesa el sector por la pandemia; dos meses después la organización tiene preparado un marco normativo para ayudar a los trabajadores del arte a revertir la paralización total de su labor económica y artística causada por las medidas sanitarias y económicas derivadas del COVID-19.

La propuesta que reciben el presidente Alvarado y los diputados establece la creación de un Plan Estratégico para la Atención y el Salvamento del Sector Cultural (PESC), “considerando los graves efectos que ha generado la emergencia nacional provocada por la pandemia del SARS-COVID-19 sobre la condición económica de las personas trabajadoras del Sector Artístico Cultural” (sic), según reza el documento.

Los objetivos plasmados van dirigidos a facultar al Ministerio de Cultura y Juventud (MCJ) a realizar la definición, distribución y asignación de recursos para el Plan Nacional de Emergencia y Salvamento Cultura.

“Este plan deberá establecer mecanismos diversos que permitan apoyar a las personas beneficiarias y promover la iniciativa privada para el progreso artístico nacional, considerando el impacto de la emergencia nacional provocada por la pandemia del COVID-19”.

El texto especifica que los beneficiarios del Plan son las personas trabajadoras del arte desempleadas, con suspensión temporal de los contratos laborales o reducción de las jornadas o que sean trabajadoras independientes con sus ingresos afectados a consecuencia de la entrada en vigencia del Decreto Ejecutivo 42227-MP-S; así como de las medidas adoptadas durante la fase de respuesta y rehabilitación de la emergencia.

La directora teatral, gestora cultural y miembro de la REC, Gladys Alzate, dijo a UNIVERSIDAD que van a solicitarle a los diputados que revisen el presupuesto del MCJ para que los apoye en formas de financiación para el salvamento y reactivación del sector.

Proceso estéril con MCJ

La REC está integrada por 21 organizaciones de las artes escénicas (música, teatro, danza, folclor), artes plásticas, audiovisuales y literarias.

Para Alzate, dado que la emergencia va a prolongarse quizá hasta el 2022, la estrategia de la organización está dirigida a acuerpar a los trabajadores del arte frente a un escenario en que el Ministerio de Cultura y Juventud (MCJ) no responde como lo requiere la grave coyuntura.

“Habíamos iniciado un proceso de trabajo con el Ministerio porque es el canal más directo de comunicación para el sector y sobre todo porque es la institución que maneja y administra los recursos más importantes conducidos hacia este sector”, detalló Alzate.

Sin embargo, a pesar de dos meses de reuniones semanales con la jerarca Sylvie Durán y representantes de la institución en temas específicos como el del presupuesto del ministerio, la REC llegó a la conclusión “de que ha sido un camino completamente estéril”.

De acuerdo con Alzate, las autoridades nunca llegaron con una propuesta concreta “más que presentaciones en Power Point, promesas y una exigencia de trabajo muy fuerte de pasarles propuestas, ideas, de articular… fue muy frustrante, porque ellos sabían lo que nosotros estábamos buscando: respuestas en relación con qué presupuesto se podía mover para redireccionar a fondos concursables y beneficiar a más gente”, explicó.

La REC realizó un análisis sobre el presupuesto mediante el cual concluyeron que existe una desproporción en la asignación de recursos que la institución ejecuta. “El MCJ se ha convertido en un monstruo que se consume a sí mismo porque son 46.000 millones de colones que recibe, de los cuales se redireccionaron directamente a los artistas un porcentaje mínimo”, precisó.

Por ejemplo, para esta coyuntura de crisis sanitaria y económica, en términos de los fondos concursables de todas las instituciones juntas del MCJ, se ejecutaron en total 782.600 millones de colones, cifra equivalente al 1,7 % del presupuesto general de la institución; los recursos fueron distribuidos a 1.040 personas, de los 33.000 trabajadores del arte que la Encuesta de Hogares contabilizó en el 2019.

Con los resultados de ese análisis del presupuesto, según afirmó Alzate, la idea era construir una agenda conjunta; sin embargo, para ella las autoridades ministeriales tienen una posición cerrada y autocrática. “A estas alturas no nos han respondido nada en relación con la reprogramación de los eventos masivos ni los montos asignados a ellos”.

“Están reaccionando demasiado lento. Hace como un mes nos dimos cuenta de que con el incremento de contagios de COVID-19 en el país, la reprogramación planteada por la presión del sector no es posible. No es posible hacer un Festival Internacional de las Artes abierto al público, ni un Festival Internacional de Cine, y la Feria del Libro será virtual. Hay demasiado hermetismo”.

La REC le propuso a la ministra de Cultura hacer incidencia en la Asamblea Legislativa, los ministerios de Economía, Industria y Comercio y Ciencia, Tecnología y Telecomunicación e instituciones como la Caja Costarricense del Seguro Social, pero a la fecha no se ha concretado.

“Si ellos que están en Casa Presidencial y los consejos de Gobierno con la mesa servida no pueden hablar sobre la realidad que vivimos, pues entonces lo vamos a hacer nosotros, porque la construcción de ese camino conjunto no nos ha dado ningún resultado”, apuntó Alzate.

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