Han pasado cuatro años de paciente espera y ardua preparación para que nuestro país represente a Centroamérica en el mayor evento mundial de diseño escénico, que se lleva a cabo en la ciudad de Praga, República Checa.
Los miembros de LaMae (Memoria de las Artes Escénicas), fundación sin fines de lucro cuyo objetivo es registrar la historia y actividad contemporánea de la escena costarricense, marcan así un hito al ser invitados este año a la Cuadrienal Praga (PQ2019), a celebrarse del 6 al 16 de junio próximo.
“La Cuadrienal Praga es el evento que reúne lo más importante a nivel mundial del arte y el diseño performático, la arquitectura teatral y la escenografía. Ser parte de esta exhibición es una oportunidad invaluable para mostrar la producción y el pensamiento desarrollado desde Costa Rica en estos campos”, indicó Mariela Richmond, miembro de LaMAE.
En el transcurso de estos años la agrupación costarricense, con sede en el edificio patrimonial La Alhambra, en San José centro, se ha convertido en el enlace curatorial del evento checoslovaco.
El punto de partida de esta conexión ocurrió luego de que varios profesionales del diseño escénico integrantes de LaMAE visitaron la QP por iniciativa propia en el 2015. De ahí surgió, en primera instancia, que la fundación realizara, en los años sucesivos, los laboratorios de diseño escenográfico, vestuario e iluminación.
Esta plataforma de formación e investigación resulta de vital importancia para Costa Rica, ya que ninguna de las escuelas de teatro y arte escénico de las universidad estatales especializan a los estudiantes en dichas ramas.
“Son tres años de estar discutiendo qué es el diseño escénico en nuestro país, dónde están los límites del diseño y de la teatralidad, del performance. Todas esas barreras se empiezan a diluir, se mezclan y se genera conocimiento, y surgen nuevas vertientes de cómo vemos el diseño escénico”, destacó Gabriel Mejías, productor de LaMAE.
Esta trayectoria permitió a la agrupación ser invitada al QP2019 para compartir escenario con más de 90 países participantes, y representar la producción nacional del diseño para la escena con tres exhibiciones: “Países y Regiones”, “Fragmentos”, y “Estudiantes”.
De acuerdo con Felipe da Silva, también integrante de LaMAE, la temática para el Pabellón de “Países y Regiones” de este año “es la no frontera entre los países; tanto así, que los stands no pueden tener paredes, para quitar el aislamiento y que haya una conversación entre todos los expositores”.
País de miles de verdes
La exhibición conceptualizada y realizada por el LaMAE para dicho pabellón fue titulada Hipótesis escenográfica de un territorio verde, una instalación performática que “considera la posición geográfica del lugar donde vivimos como generadora de comportamientos e idiosincracias, y que contiene diversidades”, explicó Richmond.
La propuesta pretende ser un lente mediante el cual se observe un territorio “húmedo, matizado en incontables tonalidades de verde”, un umbral o un espacio que es a la vez canal y borde, con el fin de generar una investigación plástica y espacial que evoque un lugar de múltiples encuentros y pasajes.
Según Carlos Schmidt, arquitecto y diseñador del espacio escénico e integrante de LaMAE, la exposición para el pabellón “Países y Regiones” es un producto experiencial que no pueden catalogar como una instalación.
Al reflexionar en torno al proyecto, Schmidt señala que el grupo hace diseños escénicos para un ser vivo con una corporalidad, al que le dan un espacio, luz y vestuario, y que otros experimentan como espectadores.
Por esta razón, la propuesta para la QP2019 es una paradoja, pues no hay ejecutantes. “Al no tener esos cuerpos es un momento extraño la forma de exponerlos”, añadió Schmidt.
Para describir el proyecto, Schmidt precisó que se basa en una serie de trajes con distintas tonalidades de verde en referencia a que las personas que habitan en el país “estamos acostumbradas a ver miles de verdes, cosa que no ve ni mira el que no tiene una biodiversidad como la nuestra”.
Con el fin de saldar la paradoja de no tener ejecutantes en el espacio escénico, la propuesta es provocar al público para que se sitúe en el centro y que con su cuerpo presente, otros le miren.
Además de ser un proyecto oneroso, Schmidt contó que fue titánico no solo realizarlo, sino poder asistir a la QP2019.
Para conseguir los fondos, aunque LaMAE concursó y ganó un fondo de Proartes del Ministerio de Cultura y Juventud, la institución no ha dado mayor apoyo. “Es la primera vez en 40 años que vamos a la Cuadrienal y creímos que con la declaratoria de Esencial Costa Rica y de interés cultural tendríamos más colaboración”, dijo Schmidt.
“En cultura hay algo que no se entiende, sobre todo en la “marca país”, porque está dirigido a lo económico, entendido como empresa con productos que vende”, se lamentó Schmidt.
Bitácora, esferas y safari
LaMAE presentará, además, dos exposiciones en el marco de la QP2019: una para el pabellón “Estudiantes”, con una propuesta de quienes participaron en los laboratorios de escenografía, vestuario e iluminación impartidos por el grupo; y otra para la sección “Fragmentos”, en la que expondrán el cuaderno-bitácora del director de teatro Luis Carlos Vásquez.
De acuerdo con Susan Ovares, arquitecta, vestuarista y representante estudiantil de la delegación de LaMAE, la visión transdisciplinaria que proyecta la agrupación en sus laboratorios se hizo patente en la propuesta que mostrarán en el QP2106, titulada Vestigios de piedra.
Ovares considera que a partir de su formación académica y del conocimiento como vestuarista ha sido partícipe de la interacción de las disciplinas en la construcción de la propuesta para el pabellón Estudiantes.
“Somos estudiantes que tenemos diferentes énfasis: artes escénicas, comunicación colectiva y producción audiovisual, artes visuales, arquitectura; cada uno aporta y se vuelve una creación conjunta”, expresó.
Al respecto, Emanuel Zúñiga, graduado de artes visuales y participante en el laboratorio de diseño de iluminación de LaMAE, expuso que el abordaje permitió que distintas personas hablaran del mismo tema desde distintos lugares como la fotografía, la danza y el teatro.
“Me ha hecho pensar en el concepto de la obra de arte total. El lab (de LaMAE) se ha dado a la tarea de sistematizar el proceso de diseño creativo que no existía en Costa Rica, donde la gente era muy técnica. Eso enriquece la obra el diseñador de la escenografía, de vestuario, pues es un actor más que está en la escena ejecutando”, declaró.
Sobre la propuesta estudiantil, Zúñiga precisó que la exposición pretende cuestionar la narrativa alrededor de las esferas de piedra arqueológicas declaradas Patrimonio Mundial por la Unesco en el 2014.
“La idea es plantearse preguntas en torno a estos objetos como elementos romantizados de representación de la identidad nacional”, concluyó Zúñiga.
Finalmente, para el apartado de “Representaciones de performance y happenings”, Costa Rica presentará la obra “Safari poliédrico”, a cargo de Felipe Salazar y Daniela Cubero, quienes presentaron la propuesta por separado y la curaduría de la Cuadrienal los seleccionó.
