Con una carta abierta al sector artístico y cultural, la ministra de Cultura y Juventud, Sylvie Durán, respondió, esta tarde de viernes 27 de marzo, a las demandas que los trabajadores del arte hicieron patentes en un par de misivas dirigidas a la jerarca y a la Asamblea Legislativa en los últimos días del mes en curso.
En el documento, Durán expresa que valora “las inquietudes puntuales y la valiosa oferta de propuestas y escenarios constructivos y de articulación, que diferentes grupos de nuestro sector han elevado ante este Ministerio”, surgidas ante la pandemia COVID-19, que hoy contabiliza 263 casos en nuestro país.
La carta desvela en uno de los puntos que según la Encuesta de Hogares (ENAHO 2019), del grupo de personas que se dedican a actividades artísticas 1.310 están en pobreza extrema y 2.718 son pobres, es decir, que de partida hay 4.000 personas a las que la institución debe ayudar de forma articulada.
En consecuencia, el MCJ participa en espacios con el Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) y la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), con el fin de atender la crisis generada por el COVID-19, y de esta forma apoyar a esta población vulnerable.
A la vez, en los temas de protección y eventual recuperación de la fuerza productiva y las oportunidades de empleo e ingreso, la institución articula propuestas con el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) y su Fondo de Desarrollo Social (FODESAF), el Ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC) y sus programas relacionados con las micro y pequeñas empresas (PYMES) y el sistema bancario nacional, entre otros.
“Todo lo anterior, con miras a asegurar la inclusión del sector en las medidas institucionales en proceso”, reza la carta.
De acuerdo con la carta ministerial, la institución se ha enfocado en atender las necesidades del sector, “proyectando los escenarios de respuesta en torno a la generación de empleo, la reprogramación de nuestras actividades temporalmente suspendidas, la reorientación de fondos y el impulso a procesos de desarrollo, convencidos junto a ustedes de que la cultura, como derecho, debe convertirse ahora más que nunca, en un instrumento de resiliencia social”.
Emergencia nacional COVID-19
Asimismo, en la respuesta a los trabajadores del arte, Durán dice estar consciente de que las medidas sanitarias adoptadas por el Gobierno de la República para la prevención de contagios, han golpeado directamente la actividad del sector; pero que estas acciones sanitarias deberán seguir por algunos meses para asegurar el cuido y la vida de todas las personas.
“Sabemos que la normalización de nuestra convivencia no será inmediata y que el retorno a las actividades masivas y de encuentro, previstas tentativamente para septiembre, traerá varios meses de restricción para el quehacer artístico”, agrega Durán. Por tanto, a corto plazo, el sector “deberá prepararse junto al resto del país, para una reactivación del sector lo más sólida y estratégica posible”.
En la carta, la ministra explica cómo funciona la institución en el contexto de emergencia nacional, en que debe participar activamente de acuerdo con los protocolos de ley y las directrices gubernamentales que rigen la gestión de crisis, especialmente la vivida por el COVID-19 que “tiene proporciones y afectaciones excepcionales”.
De este modo, el MCJ se une a las Mesas Ejecutivas, Equipos Técnicos o grupos de trabajo coordinados por el Centro de Operaciones de Emergencias (COE) y el Consejo Económico para la atención del COVID-19: Grupo de Trabajo sobre Concentraciones Masivas; Mesa de Educación; Equipos Técnicos de la Mesa de Protección Social (con atención a poblaciones indígenas, migrantes y otros grupos con condiciones de vulnerabilidad y de apoyo al tejido productivo más informal, independiente o de pequeña escala); y Mesa PYME liderada por el MEIC en coordinación con el Consejo Económico.
Apunta el documento que en dichas instancias de trabajo, el Ministerio se ha abocado a implementar las diversas directrices (sanitarias, laborales, de alivio económico, entre otras) valorando los impactos, tanto hacia el servicio público, como del sector y de su afectación económica; y elevar la información disponible para detallar la situación de los trabajadores y trabajadoras de la cultura y sus afectaciones.
El MCJ ha colocado en estas mesas de trabajo para su análisis los resultados de proyectos en los cuales venía avanzando y que a partir de esta coyuntura se acelerarán.
Los proyectos giran en torno al análisis sobre la condición del artista, abordado en conjunto con la Gerencia Financiera de la CCSS y cooperantes internacionales como UNESCO y Organización Internacional del Trabajo (OIT), entre otros; la puesta en marcha de la Estrategia Costa Rica Cultural y Creativa, consolidada mediante decreto ejecutivo y acompañada por el BID; la información y datos que se produce con instrumentos como la Cuenta Satélite, los registros administrativos, el sistema de información cultural, la programación presupuestaria y otros.; y la generación de un documento resumen con lo anterior y la interpretación para el sector, de las medidas tomadas por el Gobierno.
Entre las propuestas, también el MCJ puso a disposición del sector cultural y artístico una consulta pública online para aproximar información cuantitativa y cualitativa sobre necesidades, efectos y potencialidades, ante la coyuntura sanitaria. El formulario de dicha consulta estuvo habilitado del 18 al 21 de marzo de 2020 y se procesa en estos días.
Reprogramación de actividades
En relación con los eventos y actividades producidos por el MCJ y “conscientes de las necesidades en materia de empleo y en consideración del periodo de pausa al que nos vemos obligados, estamos diseñando la reprogramación institucional de modo que se minimice la pérdida de oportunidades para el sector”, se señala en la carta.
Sin embargo, en la misiva, Durán hace la salvedad de que se debe tomar en cuenta que parte de los recursos de la cartera, “especialmente en el ámbito de las artes escénicas, provienen de ingresos propios generados a través de las taquillas, los alquileres y los tributos asociados a las actividades públicas y de entretenimiento. Esos ingresos se han visto abruptamente mermados, como lo están viviendo en general nuestro sector, otros grupos productivos y la hacienda pública”.
La propuesta del MCJ es que antes de cancelar programaciones, “se retomen una vez pasada la cuarentena con los ajustes correspondientes, incluyendo la necesaria suspensión de algunas contrataciones para asegurar un nuevo calendario. Cabe precisar que la certeza sobre este el escenario de reprogramaciones requiere aún un compás de espera, en atención a los lineamientos de nuestras autoridades”.
Con respecto al diálogo con el sector, Durán aseguró estar terminando el marco de argumentación y datos para impulsar las medidas de gobierno en el sector cultura. El resultado será “volcado en un documento especialmente diseñado para el sector, que será el insumo de partida para que el Ministerio junto al sector entremos en diálogo con una base común de información y establezcamos los mecanismos de respuesta que requeriremos habilitar entre todos”.
En acompañamiento a la carta abierta, Durán compartió con el sector la hoja de ruta prevista con el objetivo de identificar acciones y definir esfuerzos conjuntos en favor de la protección social de las y los trabajadores de la cultura, la recuperación post-cuarentena y la reactivación del sector cultural.
“Es fundamental acotar que la implementación de las medidas que se definan, así como aquellas propuestas de naturaleza más estructural en respuesta a situaciones que anteceden, inclusive, a la crisis, deberán ser atendidas en la agenda que se defina, una vez que logremos dar respuesta a la emergencia como tal”, establece finalmente el documento.
