País

Un portón “protege” al territorio indígena Bribri del COVID-19

En la entrada, un rótulo y empleados de Aditibri impiden el paso de personas nacionales y extranjeras ajenas al territorio indígena. Hasta el momento, Talamanca solo presenta un caso de COVID-19, que ni siquiera es de la zona. 

Si usted desea entrar al Territorio Indígena Bribri de Talamanca, la tarea no será sencilla, pues deberá pasar por los controles de seguridad en la entrada; es más, un rótulo le informará que “no se permite el ingreso de turistas nacionales y extranjeros; ni de autos, motos y vendedores que no sean de la zona, ni taxis y buses con sobrecarga de pasajeros”.


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La medida fue tomada con el objetivo de proteger a la población indígena del COVID-19, y es que aunque en Talamanca se registra un caso positivo desde el pasado 7 de mayo, realmente este corresponde a un transportista extranjero y no a un vecino de la localidad.

En una parada de autobuses de Talamanca, las personas se hacinan mientras esperan el transporte público. (Foto: Katya Alvarado)

La entrada al Territorio Indígena Bribri es tan rigurosa que incluso la seguridad que se encuentra en el portón sube a los buses para revisar quiénes no son parte de la zona indígena. A estas personas no se les permite el acceso.

“A la gente que viene de San José y tiene familia adentro no los dejan pasar”, señaló Mayra Aráuz, vecina de Talamanca.

Los medios de comunicación, por su parte, pueden ingresar al lugar, pero no sin antes responder a dos empleados de la Asociación de Desarrollo Integral del Territorio Indígena Bribri (Aditibri) si han tenido síntomas de COVID-19, así como qué se planea hacer en el territorio indígena, el nombre de las personas que integran el equipo periodístico, su número de cédula y la placa del vehículo. La prueba de fuego es la toma de la temperatura, la cual se realiza con un termómetro digital y debe estar por debajo de los 37,5°C.

“Nosotros para defender a nuestro pueblo pusimos dos puestos de control, especialmente para controlar a gente que viene de afuera e impedirles que ingresen aquí. Muchos solo vienen a vacacionar, especialmente después de que el Gobierno dijo que se cerraban las playas. La gente entonces se venía para aquí, hubo una ola de personas que querían ingresar”, aseguró el presidente de la Asociación de Desarrollo Integral del Territorio Indígena Bribri (Aditibri), Ramón Buitrago.

“A lo interno lo que le pedimos a la población es que no estemos saliendo constantemente por cualquier cosa, sino solo por urgencias. Aquí dentro del territorio viven indígenas y no indígenas. Con la gente no indígena hemos visto que muchos tienen familia en Alajuela, Heredia y están viajando de allá para acá, quieren hacer y deshacer cuando nosotros estamos haciendo el esfuerzo. Esto es un apoyo incluso al Ministerio de Salud, es un apoyo al Gobierno y a nosotros mismos”, agregó.

Foco de contaminación

Pese a los controles en los portones, las comunidades indígenas no se encuentran exentas de ser contagiadas de COVID-19. Buitrago comentó que en este territorio hay gente que se encuentra preocupada por la pandemia del coronavirus; no obstante, existen quienes hacen oídos sordos a las disposiciones del Gobierno e incluso de la misma Asociación.

Por ejemplo, en Bribri de Talamanca existe una parada de autobuses que podría ser un foco de contaminación, debido a que las personas se hacinan en el sitio de espera y ni siquiera existen las “marcas” correctas en cuanto al distanciamiento entre personas de 1,8 metros recomendado por el Ministerio de Salud.

En este caso, el personal del almacén Gollo que se encuentra cerca del lugar presentó una denuncia ante el Ministerio de Salud, en la cual expusieron que la parada “carece de mucho aseo y salubridad”.

El presidente de Aditibri señaló que es difícil que la gente acate las órdenes; además, no hay muchos carreras de autobús hacia el territorio. “Si la gente va a trabajar y regresa en la tarde solo hay un bus y todo el mundo tiene que venirse ahí. Nosotros queremos que pongan más buses”.

Economía afectada

La economía de los pobladores de este territorio también ha sido afectada. Según el presidente de Aditibri, “aquí se elevan mucho más el costo de los productos que vienen de afuera. Además, los productos que se compran aquí son comprados por intermediarios y ellos ponen el precio que les da la gana. Hay muchas familias que la están viendo fea en estos momentos”.

Es por esta razón que también los pobladores de estas comunidades indígenas están tomando la iniciativa de sembrar lo que consumen. Durante esta pandemia, solo 1.200 de 3.000 familias se han beneficiado con paquetes de alimentos por parte del Gobierno.

“Aquí todos son pobres, escogimos a los más pobres. No sabemos cuando viene lo demás”, denunció Buitrago.

Atención a los indígenas

Desde marzo anterior, el Gobierno anunció que la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), Salud, la Caja y el Viceministerio de Diálogo Ciudadano trabajarían en conjunto con distintas organizaciones indígenas y con las poblaciones de los territorios para implementar una serie de acciones preventivas contra la propagación de la COVID-19 en estas zonas.

En ese contexto, el Ministerio de Salud emitió una serie de lineamientos técnicos de carácter obligatorio para todos los funcionarios de salud, con el fin de trabajar en la contención y prevención en los territorios indígenas. Estos se basan en el trabajo de participación comunitaria, acciones de comunicación, abordaje de casos sospechosos y atención a pacientes.

Entre las medidas se incluyen canales de comunicación cercanos a la población, reconocimiento a figuras tradicionales, además de traslados debido a las complejidades geográficas y logísticas que presentan la mayoría de las comunidades en los territorios indígenas.

Por su parte, las direcciones regionales de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) están trabajando en la difusión de mensajes en cabécar, bribri, ngäbere e idioma maleku con los protocolos de higiene, así como en el desarrollo de materiales didácticos bajo el lema “Escudo Covid-19”.

“Con territorios indígenas hemos tenido la ventaja de que ellos desde el inicio pusieron restricciones de paso, entonces ellos están bien preparados, y si nosotros queremos pasar tenemos que pedir permiso en la Asociación. En el caso de nosotros (CCSS), ellos reciben personal de salud que va a atender. Ellos tienen la ventaja de que tienen filtro. Ellos están bien comprometidos, se les han dado comunicaciones, están bombardeados por medios de comunicación y han sido testeados”, externó el director del Área de Salud de Hone Creek Talamanca, Mauricio Solano.

En los territorios indígenas Bribri y Cabécar se encuentran los Ebais de Bambú, Suretka, Amubri, Katsi, Sepecue y China Kichá. Todos estos centros médicos tienen la indicación de tomar muestra a cualquier paciente sospechoso.

Solano destacó también que ningún indígena sospechoso por COVID-19 se ha negado a someterse a la muestra. Por semana, se realizan entre 3 y 5 muestras semanales en territorios indígenas de Talamanca.


 

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